Lo que parecía un hit periodístico fue el origen de una controversia nacional al renunciar tres personajes de la vida pública por un video. Sirve la polémica para evaluar cómo estamos en materia de democracia, valores y derechos.

Se trata de una conversación homosexual, con pretensiones de elaborar una prueba, entre un insinuante y provocador capitán de la Policía y el ex viceministro del Interior Carlos Ferro. El video lo colgó La FM y recibió miles de visitas por el explícito lenguaje sexual y porque fue presentado como la prueba reina del denominado caso de “La Comunidad del Anillo”, una supuesta red de prostitución conformada por jóvenes y apuestos mozalbetes de la Policía. Se sabe que el video fue aportado por un importante funcionario nacional. Es decir, el poder usando al periodismo.

Vale citar al veterano reportero Javier Darío Restrepo: “Un periodista no le debe creer a nadie, menos si se trata de autoridades. Quien está en el poder tiene muchos motivos para mentir y pocos alicientes para decir la verdad”.

Pero lo que al comienzo fue un golpe de opinión que produjo la renuncia de Ferro y del general Palomino, terminó con la sorprendente salida de La FM de Vicky Dávila. Y lo que menos se esperaba: que Ferro, quien en el video grabado subrepticiamente comenta con detalles sus prácticas homosexuales, asistiera ayer en la mañana con su esposa Marcela Pineda a una sentida entrevista en directo por Blu Radio y Caracol Televisión.

El caso, que parecía un monumento a la humillación, dio un vuelco. Con la defensa del derecho a la intimidad y al núcleo familiar, la esposa de Ferro entregó un testimonio que crea sorpresa y admiración. Todo al mismo tiempo. Es entonces cuando surgen preguntas sobre el dilema entre el derecho a la información y el de la intimidad. Pero aquí lo que prima es la democracia, es decir: el respeto por el otro.

Por eso no se descarta que Dávila esté sobre la delgada línea de la injuria indirecta porque el video, que en su esencia no revela nada relacionado con la existencia de “La Comunidad del Anillo”, sí afecta moralmente a Ferro.
En tres días los colombianos hemos visto cómo el efecto mediático de las redes sociales produce unos inesperados bandazos inimaginables en otras épocas.

Coletilla: Mañana en la Cinemateca del Caribe será emitido un documental sobre Camilo Torres, el cura guerrillero, figura histórica que después de su muerte crea controversia. Sacerdote y sociólogo del seno de una reconocida familia bogotana, fue un comprometido con el servicio a la gente, partiendo de las bases del catolicismo. No sabemos qué hubiese pasado si en vez de irse al monte hubiera seguido en el servicio religioso y comunitario. Su repentino ingreso a la subversión y obligado a ganar un fusil en su primer combate han sido considerados actos de torpeza política. Se perdió un intelectual y humanista del que los católicos hubiésemos podido haber tomado no solo un ejemplo, sino una doctrina de auténtica fe por el servicio a los pobres del mundo. Flaco homenaje le hace el ELN decretando un paro armado.

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