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El ‘Tiburón’ se resiste a morir, sigue aferrado a la vida, así las posibilidades de mejora sean remotas. Junior venció anoche 2-1 a Cortuluá, en el Corazón del Valle, y se mantiene aún con opciones matemáticas de pelear por la clasificación a los cuartos de final de la Liga Águila II-2016.

El equipo rojiblanco sigue dando la pelea por lo que parece imposible. El pasado jueves superó a Millonarios y ayer hizo lo mismo con el Cortuluá, mostrando en ambos partidos pundonor y momentos de buen fútbol.

Liderado por un Michael Rangel que sigue de romance con el gol, el ‘Tiburón’ se impuso con autoridad. Manejó el partido de principio a fin, le dio trámite y supo hacer daño. Pudo ganar por un marcador más amplio, pero el palo y las intervenciones del arquero local lo evitaron.

Se fue adelante en el marcador con un tanto de gran factura de Rangel, al minuto 22 de la etapa inicial. Centro perfecto de ‘Carachito’ Domínguez y cabezazo certero del atacante rojiblanco, para inflar la red del cuadro vallecaucano.

Séptimo tanto del santandereano, tercero de forma consecutiva en la Liga Águila II-2016. Le marcó a Envigado FC, Millonarios y Cortuluá.

‘El Tiburón’ mantuvo el control del juego, liderados en el medio campo por un Vladimir Hernández inspirado, que volvió loca la defensa rival con su fútbol dinámico y alegre.

Clemente Palacios tuvo el segundo tanto en su pierna derecha, pero su ‘misil’ se estrelló rebeldemente en el vertical.

Era un anuncio. Junior quería más e iba por el tanto que asegurara en gran medida el triunfo. Gol que llegó en el inicio de la etapa complementaria.

Excelente jugada individual de Vladimir Hernández, que recibió perfilado y, con la marca de dos defensores encima, supo definir con frialdad ante la salida del arquero local.

Todo estaba dado para que el ‘Tiburón’ terminara tranquilo el partido, pero no, Junior sufrió más de la cuenta. Bajó la intensidad de su juego, le regaló el protagonismo al Cortuluá y por poco se le escapa el triunfo.

El equipo del ‘Corazón del Valle’ descontó a través de Juan Bolaños y apretó la contienda. Pero le alcanzó, los rojiblancos supieron cerrar líneas y defender a muerte el triunfo.

Dice un viejo adagio popular, 'no está muerto quien pelea'. Junior quiere luchar hasta el final, así las opciones sean remotas.