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El director nacional de Medicina Legal, Carlos Valdés Moreno, decidió contratar a Dayana Jassir De la Hoz para que su hijo y ella no quedaran desamparados luego del crimen de Eduardo Pinto Viloria, jefe del organismo forense en la Costa.

'Una vez muere nuestro compañero, como un acto de solidaridad con la familia y para no dejarlos desprotegidos, yo la incorporé. La asigné en el cargo de profesional porque ella es bacterióloga', confirmó ayer Valdés en diálogo telefónico con esta Casa Editorial.

Antes de la muerte de su esposo, Jassir tenía un contrato de prestación de servicios para apoyar un programa entre el Bienestar Familiar y Medicina Legal.

Ese vínculo fue terminado después de que muriera Pinto, con el fin de darle el nuevo como profesional universitario en la Regional Norte, por un salario mensual de $3 millones 100 mil.

'Es un cargo de la nómina del instituto, de profesional grado 10. En primera instancia se le dieron tres meses para mirar si la persona es apta para el cargo. Obviamente, al ocurrir estos hechos, el contrato se le terminó inmediatamente', indicó Valdés Moreno.