María Isabel Abad ha escrito toda su vida. Es antropóloga y abogada, pero ha ejercido en el periodismo y en el sector editorial, e incluso, hizo una maestría en Estudios Latinoamericanos en la Universidad Autónoma de Madrid para alimentar esa pasión.
Hotel París es su primera novela, cuenta que el texto nació de un momento de su vida en el que escribió una historia tan larga que no sabía en qué podía terminar. 'Así arranqué a construir personajes y como al cabo de dos años de tirar muchos papeles, tomé todas esas voces que eran muy distintas, y las logré situar en un escenario que era un sanatorio'.
Hotel París, no es solo el nombre de la novela, sino también de esta casa de reposo en la que se encuentra recluida Raquel, una jóven de unos 28 años, que considera que enfrentarse a las heridas de su pasado es la única manera de recuperar su estabilidad. Dentro del sanatorio, junto a Raquel, se encuentran en tratamiento todo tipo de personas con niveles de complejidad distinto. 'A lo largo de todo el relato en el Hotel París ella logra desentramar un secreto y un misterio que está planteado, además de enamorarse y conocer a otras personalidades distintas a la de ella', agrega Abad.
La autora también explicó que las conversaciones con cada uno de los personajes de la trama están ritualizadas y que detrás de cada uno de los diálogos que Raquel entabla existe una necesidad de descubrir su propia verdad.
En el relato hay un constante salto en el tiempo, puesto que Raquel viaja constantemente a los recuerdos de su pasado para encontrar no solo el origen de su locura, sino también para encontrarse a sí misma.
'A lo largo de todas las conversaciones, diálogos y recuerdos está la intención como de buscar su propia verdad, la raíz de su propia locura y también de su sensibilidad. Lo que tiene Raquel es un extrañamiento con las cosas del mundo que le parecen violentas y abusivas, y en esos momentos es que se despliegan más sus alucinaciones y su locura. Pero yo diría que es una especie de una locura lúcida', explicó la autora.
La presentación de la novela se realizó ayer en Medellín, ciudad en la que transcurre el relato y donde nació la escritora.
