Con la salida del minhacienda, a causa del entramado de corrupción en la Ungrd, el Gobierno se expone a un agravamiento de su crisis fiscal y de credibilidad.
Para qué exponerse o exponer a la gente del entorno cercano a una aventura que puede resultar fatal en el peor de los casos, o incapacitante de por vida.
La privilegiada ubicación de esta playa urbana que alinea río, ciénaga y mar en un solo lugar la convierte en un referente de turismo sostenible a preservar.
Seguimos naufragando en esta lucha que cada año se cobra la vida de cientos de menores, víctimas de una vergonzosa indolencia estatal y privada. ¿Hasta cuándo?