Barranquilla, Bucaramanga (Santander) y Tuluá (Valle del Cauca) serán escenarios de investigación para el estudio ZEN (Zika en Embarazadas y Niños), que hará seguimiento por cinco años a 5.000 casos de embarazadas con el virus del Zika para poder determinar el impacto de la enfermedad a largo plazo. El estudio incluirá a gestantes que estén en su primer trimestre, sus parejas y bebés.
Así lo anunció en la tarde de ayer el ministro de Salud y Protección Social, Alejandro Gaviria, quien destacó la labor articulada del Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud de Colombia, en apoyo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos para la realización de este estudio, el cual comprende una inversión de más de $30.000 millones. El ministro, sin embargo, se negó a ser cuestionado sobre otros temas.
'Es un aporte de conocimiento que se hará al mundo desde Colombia y permitirá hacer seguimiento a un virus del cual no tenemos claro cuáles serán las secuelas. Hay una sospecha en cuanto a la relación del zika y la microcefalia de que los bebés no nacen con microcefalia sino que pueden desarrollar complicaciones cognitivas así que esto nos servirá para generar conocimiento', explicó Gaviria.
Durante el acto de presentación, que se llevó a cabo en el Hotel Country Norte de Barranquilla, hizo presencia también la directora del Instituto Nacional de Salud, Martha Lucía Ospina; delegados de los CDC de Atlanta para la respuesta de zika; funcionarios de la Embajada de EE.UU. en Colombia y el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano.
Sobre el virus en el territorio nacional, si bien es cierto que se ha superado la etapa epidémica con un reducción de 98,7% en el número de casos– durante la primera semana de 2017 se notificaron 38 casos sospechosos mientras que en el mismo período del año pasado se presentaron 2.889–, esto 'no quiere decir que todo esté controlado', advirtió el ministro.
Con respecto a Barranquilla, la directora del INS, Martha Ospina, resaltó que 'aunque no tengamos muchas casos en los últimos cinco meses, en total se presentaron casi 200.000 casos en el país', de los cuales 20.000 fueron mujeres embarazadas. 'Esto nos dice que pueden haber consecuencias graves para la salud que desconocemos', reflexionó.
En esto también hizo hincapié el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, quien reconoció creer que 'ya habíamos superado este tema, pero no'. 'La punta del iceberg es la microcefalia, pero no sabemos exactamente que otras consecuencias se pueden venir con el tiempo y es supremamente importante hacer un llamado de atención', expresó el mandatario.
Los picos más altos de pacientes con zika en Barranquilla tuvieron su momento en diciembre de 2015, año en el que notificaron 754 casos, (57 embarazadas y 5 de Guillain Barré) mientras que en enero de 2016 ingresaron al sistema de vigilancia 869 casos en la ciudad, de los cuales 234 fueron de gestantes y 22 con Guillain Barré.
El estudio
Desde mayo del año pasado en Barranquilla ya se realizaba un estudio con proyecciones similares al ZEN. El proyecto VEZ (Vigilancia a Embarazadas con Zika) se encargó de recolectar información de los embarazos afectados por el virus y de hacer seguimiento a los recién nacidos productos de estos embarazos durante sus dos primeros años de vida.
Luego de siete meses de trabajos, VEZ acumula inscritas más de 1.200 mujeres embarazadas que padecen enfermedad por el virus del Zika.
A diferencia de éste, ZEN analizará a través de los datos obtenidos del sistema de vigilancia para descubrir las tendencias y los patrones de la infección por el virus del Zika. Para esto, los CDC (Centro de Operaciones de Emergencia) apoyarán en el desarrollo de la investigación así como en la capacitación de expertos en hallazgos patológicos asociados con el zika.
Se rehusó
El ministro de Salud, Alejandro Gaviria, fue consultado sobre la situación de los pacientes de Coomeva, pero se negó a dar declaraciones sobre temas aislados al zika. 'No hablaré de nada más', dijo a la prensa.