En la entrada de la gobernación de Córdoba y la Alcaldía de Montería se apostaron en el suelo hasta este mediodía 80 indígenas emberá katíos que argumentan haber salido desplazados desde un cabildo en el Nudo del Paramillo, por supuestas intimidaciones de las Farc.
Los aborígenes dicen que tienen temor de permanecer en su territorio y desde la noche del jueves salieron hacia Montería, donde permanecen en hacinamiento en la casa indígena del barrio La Coquera.
El coordinador de la Unidad de Atención y Orientación a la Población Desplazada (UAO) en Montería, Ramiro Salgado Támara, dijo que la amenaza no fue contra todos los 80 Emberás, sino contra tres o cuatro, pero por unidad familiar y arraigo se desplazó toda la comunidad.
'Todas las entidades que tiene que ver con esta población tendrán su responsabilidad de acuerdo con el objeto social que tengan. Ellos vienen de uno de los 21 cabildos que existen en Tierralta', dijo Salgado Támara.
Sostuvo que la Policía ofrecerá la protección en el sitio donde permanecen, hasta tanto se verifiquen los hechos en la zona para evitar nuevos desplazamientos y poder garantizar en su debido momento, el retorno de los indígenas.
'Existen acciones de misiones humanitarias en la zona donde sucedieron los hechos, para validar un poco el riesgo de la zona y evitar más desplazamiento', precisó el funcionario.
La recepción de los 80 indígenas es el primer desplazamiento masivo que llega a Montería en lo que va corrido del 2013. En esta ciudad hay actualmente 76.400 víctimas. De esa cifra el 85 % son propiamente desplazados y el 15 % restante se trata de hechos victimizantes diferentes al desplazamiento.
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