
La belleza natural que rodea a Santa Marta, sus playas y sus mares, han conquistado los corazones de cientos de extranjeros que la visitan, atraídos por las fotos e imágenes que se exhiben en los portales más importantes del turismo mundial. Pero quien lo creyera, el Unión Magdalena, el equipo de fútbol del terruño, también seduce y despierta sentimientos y pasiones.
La historia que a continuación se narra podría semejarse a un texto extraído de los escritos macondianos del Nobel de literatura Gabriel García Márquez. Pero no, es la realidad pura y vivencial de Ingo Weber, un alemán que desde hace quince años visita la Perla de América, donde se enamoró de una escultural samaria y del Ciclón Bananero.
Weber nació en Colonia, Alemania, la cuarta ciudad en importancia del país teutón, la cual se encuentra ubicada a orillas del río Rin. Es hijo único y su pasión por el fútbol se ha dado desde muy joven. Su pueblo natal fue sede de los Mundiales de fútbol de 1974 y 2006, además de la Eurocopa 1998 y la Copa Confederaciones 2005.
Su equipo en Alemania es el Borussia Mönchengladbach, club que participa en la primera división de la Bundesliga, pero no es de lo más ricos.
Desde que pisó suelo samario en 1997, antes de irse para las playas, preguntó por el estadio de fútbol para presenciar un entrenamiento del equipo local. Luego asistió a un partido oficial. Fue en ese momento donde se dejó atrapar por los colores azulgranas.
'Unión es mi equipo, es el equipo del pueblo. Me gusta que la gente viva y sufra por este club de tanta historia en el fútbol', expresó Ingo Weber.
El ciudadano alemán manifestó que la fiesta y alegría que se vive en las graderías por el onceno unionista no se ve en el fútbol de su país. 'Es muy impresionante que la gente siga tanto a un equipo que no tiene poder económico y que está en la lucha por salir de la B', anotó.
Tiene todos los atuendos. Pasar las vacaciones de diciembre y enero se ha convertido en una tradición para Ingo Weber, quien no falla para visitar a los familiares de su esposa. En esos días cambia su vestimenta y luce orgullosamente los colores del conjunto bananero.
'Lo primero que hice fue comprarme la camiseta del Unión. De ahí en adelante me la llevé para Alemania y con unos amigos que tienen empresas me diseñaron las gorras, anillos, medias y relojes con el escudo del equipo', indicó.
Además les distribuyó a sus empleados el vestuario del azulgrana. 'Los partidos los seguimos por internet y le digo que se pongan las camisetas para apoyar al equipo a la distancia. Me mantengo informado de lo que pasa con el Unión por los diferentes medios de comunicación de la ciudad', agregó.
La época de 2003, cuando el Unión Magdalena logró ingresar a los cuadrangulares semifinales del campeonato de primera división colombiano, se convirtió en el periodo más feliz para Weber, quien se vino para Santa Marta. 'Era un buen grupo de muchachos que nos ilusionó y llegó hasta la último. De los jugadores que más recuerdo es al portero Lucho Fernández y La Puya Zuleta, quienes fueron fundamentales en el onceno'.
Otro de los gustos que tiene por la tierra samaria Ingo Weber es la música que expone el cantante Carlos Vives. 'Es un gran artista, sus canciones suenan constantemente en Alemania y gran parte de Europa. Lo que más me gusta es que ha expresado abiertamente su amor por el Unión Magdalena. El tema Pitán Pitán fue un homenaje que le hizo al equipo', sostuvo.
Ingo Weber está próximo a pensionarse en su país natal, por lo que espera ahorrar lo suficiente para instalarse definitivamente en Santa Marta, donde espera vivir sus últimos días.
Por Saith Ferez Boneth
Twitter:@ SaithFerez






















