Dos patrulleros de la Policía fueron recibidos a tiros por un hombre y una mujer que se desplazaban en una motocicleta, cuando les pidieron detenerse para practicarles una requisa en la carrera 5 con calle 35B, barrio La Magdalena.
El hecho, ocurrido el martes en la noche, se suma a otros acontecidos este año en la ciudad en los que han resultado seis policías heridos y seis presuntos delincuente han sido abatidos.
El coronel José Luis Palomino, comandante operativo de la Policía Metropolitana (Mebar), aseguró ayer ante los medios que los otros cuatro funcionarios fueron lesionados en el barrio Rebolo (2) y, el sábado anterior, dos más en Lucero.
La pareja de sospechosos del ataque de hace dos días iban en una motocicleta, de placas SVU-60A. De acuerdo con las autoridades, la mujer le pasó un arma al conductor y este inició un tiroteo con los uniformados.
En medio de la balacera, el hombre y la mujer abandonaron el vehículo e intentaron escapar corriendo, luego de herir a los uniformados, pero uno de estos alcanzó a herir al hombre, que cayó al piso, mientras que su cómplice logró huir.
UNO ESTÁ DELICADO
Palomino dio a conocer en la rueda de prensa cuáles son los partes médicos sobre los estados de salud de los policías. 'Resultan lesionados, uno en el rostro y otro con laceraciones en el cuello y en el pecho'.
Ambos funcionarios, cuyas identidades se mantienen en reserva, evolucionan en las mejores condiciones. De uno, los especialistas que los valoran ya diagnosticaron que está fuera de peligro.
'No hay afectación de órganos vitales; el otro policial sí tiene afectaciones en su rostro y el cirujano lo está interviniendo para restablecer tejidos, ya que el tiro entró por el pómulo y salió por la parte de atrás de la oreja', indicó el oficial.
RULETEROS
La Policía informó que en las pesquisas se ha conocido que el hombre y la mujer involucrados en el enfrentamiento son asaltantes dedicados al robo de celulares en la modalidad de ruleteo (recorrer las calles y atracar a cuanto peatón sea posible).
El sospechoso herido la noche del martes está identificado como Edwin Rafael Osorio Ortega, de 30 años, que fue llevado por policías al Hospital General con dos heridas de bala. Luego de que lo atendieron, fue dejado a disposición de un fiscal de la URI por cargos de porte ilegal de armas y tentativa de homicidio.
El reporte policial detalló que Osorio Ortega registra anotaciones penales por hurto y está vinculado a otras investigaciones. 'Tenemos información e indicios de que se disfrazaba con uniformes de empresas para ingresar a apartamentos', dijo Palomino.
Sobre la mujer se abrió una indagación para identificarla y ubicarla para abrir en su contra una investigación.
TOMAN MEDIDAS
El coronel Palomino señaló que en la institución se han replanteado algunas de las medidas de seguridad que cada uniformado debe tener.
De momento, se mantiene el porte de chaleco antibalas y la obligatoria compañía de al menos un funcionario al que vaya a practicar una requisa.
'Todo esto lo estamos replanteando y generando mejores condiciones para garantizar la seguridad de nuestros hombres y de la comunidad en general', dijo.
La Policía posee una dotación de 700 chalecos antibalas, cantidad que no alcanza a cubrir el número total de funcionarios. Anunció no obstante que 'vienen 1.300 más para que el 100 por ciento de nuestros hombres tengan'.
NO SOY UNA DELINCUENTE
En distintos medios de comunicación se indicó ayer que la mujer sospechosa es apodada ‘La Gorda Mauren’ y habría sacado un revólver que llevaba escondido entre el sostén y su pecho.
De acuerdo con las informaciones, la mujer es presunta integrante de una banda de atracadores y pareja de un hombre conocido con el alias del ‘Ombligón’.
Pero Janeth Rodríguez, madre de una mujer llamada Mauren y residente en la Avenida Las Torres, llamó ayer en la mañana a la Redacción de EL HERALDO y aseguró que su hija 'no tiene nada que ver' con el hecho criminal ocurrido en el barrio La Magdalena.
'Mi hija no tiene tatuajes, tampoco cuentas pendientes con la Policía, ni antecedentes. Además, ella lleva días sin salir de la casa porque está enferma de varicela. Por acá vino la Policía preguntando por ella y nosotros queremos aclarar que no tuvo nada que ver con eso', indicó la mujer.
En horas de la tarde, Meza manifestó vía telefónica que varios policías llegaron el martes en la noche a su casa y, con una fotografía suya, preguntaban por su supuesta vinculación. Pero, según ella, se descartó cualquier indicio que la involucre.
'Yo sí fui mujer del ‘Ombligón’ y me dicen ‘La Gorda’, pero yo soy una persona de bien, que no ha tenido nunca problemas con la justicia. Ya estuve en la URI aclarando esta situación y allá me dijeron que la mujer del problema es otra', afirmó.
Ante la pregunta de si ella había sido detenida o investigada por nexos con una banda de asaltantes, la mujer de, 31 años, insistió en negar que tenga registros penales. 'Soy enfermera quirúrgica y el único error mío fue haberme metido con alguien con problemas con la justicia, pero eso no me hace una delincuente'.