“¡El que no brinque no quiere a la U, el que no brinque no quiere a la U!”, coreaban más de 2500 estudiantes de la Universidad del Atlántico que bloquearon ayer la carrera 51B a la altura del barrio Country Villa.
Los estudiantes protestaron porque se oponen a la reforma de la Ley 30 que está siendo socializada por el Gobierno Nacional. “Nosotros entendemos que la universidad pública es para el pueblo. Esta Ley quiere privatizar la educación pública y los estudiantes no lo vamos a permitir”, aseguró Fernando Martes, estudiante de filosofía del alma máter.
Desde las 6 a.m. los universitarios se reunieron a la entrada de la institución y bloquearon de manera pacífica la vía por donde pasan más de 10 líneas de buses de la ciudad.
Cánticos y frases revolucionarias se escuchaban por doquier, mientras la multitud saltaba enérgica y sudada. A las 9:40 a.m. dos hombres y una mujer salieron desnudos a la calle para apoyar la causa.
Los tres en compañía de simpatizantes corrieron en círculos alrededor de la glorieta ubicada enfrente de la universidad. Mientras sostenían una caricatura de un cuervo que se posaba sobre la sigla UA hecha en huesos.
Otra de las razones de la protesta fue el engaño del que según los estudiantes, fueron victimas, cuando el pasado 2 de febrero Franklin Ortega, su representante ante el Concejo Superior, dio su voto a favor de la reelección de la rectora Ana Sofía Mesa.
“Los estudiantes, a raíz del engaño presentamos una denuncia ante el Concejo Superior apoyada con más de cinco mil firmas. En donde pedimos la revocatoria del mandato de Ortega”, expuso Martes.
A lo que Mesa respondió “Ese no es un cargo que tenga revocatoria de mandato, pero una comisión jurídica analizará el caso”.
La protesta, que ya se ha realizado en otras ciudades contra la Ley 30, se extendió pacíficamente hasta las 10:10 a.m. y luego la masa de universitarios ingresó a la institución para llevar a cabo una asamblea donde hablarían de cómo iban a continuar con las manifestaciones.
Los estudiantes quieren estar presentes en las reuniones del Consejo Superior y explicarles a sus miembros cuáles son las condiciones en que estudian.+
Por Daniel Escorcia Lugo