En un contexto de hiper-información, el debate público debe basarse en datos y hechos, y no únicamente en preferencias ideológicas o intereses particulares. Con esta premisa, nació Chequeado, el primer medio dedicado al fact-checking en América Latina, que en los últimos años ha inspirado el surgimiento de al menos 10 organizaciones en el continente.
Laura Zommer, su directora, habló con EL HERALDO, en el marco del debate público 'Chequear los poderes: Periodismo, hechos y transparencia en el discurso público local' organizado por la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (Fnpi) y Promigas, en Combarranquilla sede Country.
¿Cómo definirías el fact-checking para alguien que nunca ha escuchado hablar de lo que es?
El fact-checking o chequeo de hechos es contrastar los dichos de los líderes con los hechos y los datos. Lo que un fact-checker hace es poner en evidencia cuando algún líder político o sindical, así como un periodista o un medio dice algo que no coincide con los hechos o los datos.
La verificación de los hechos es uno de los pilares del periodismo. ¿Qué convierte lo que hace Chequeado en algo innovador?
Nosotros volvemos a la fuente del periodismo que es chequear la información, pero utilizando las nuevas tecnologías y valiéndonos de las redes sociales para abrir las fuentes. En vez de que esa información quede en la cabeza o en el oído del periodista, se transparenta y se pone a disposición de los ciudadanos para que cualquiera pueda re-chequear o reconfirmar que aquello que decimos.
Como en general ocurre con la innovación en el mundo, las nuevas ideas no nacen de la nada, sino que surgen de prácticas actuales y con una modificación se convierten en algo diferente.
Uno de los objetivos de Chequeado es 'aumentar el costo de la mentira'. ¿Qué quiere decir esto?
La misión de Chequeado es aumentar la calidad del debate público y aportar más datos abiertos y verificados para enriquecer las discusiones en el sistema democrático. Cuando trabajamos somos conscientes de que los líderes no van a dejar de engañar, de mentir o de usar los datos estratégicamente para contar la mejor historia que puedan contar. Con nuestro trabajo, si es exitoso, queremos que las personas no toleren o no lo valoren de igual forma al líder que engaña frente al que no lo hace.
Luego de seis años de estar al aire, ¿cómo evalúan el cumplimiento de su objetivo en el contexto argentino?
El estudio de medición de impacto de Chequeado todavía está en curso, pero ya podemos medirlo con tres aspectos. Cada vez que hay un discurso sobre un tema central o una conferencia de prensa sobre un tema controvertido las personas en las redes sociales reclaman que haya chequeos. Por otro lado, notamos que cada vez más los líderes políticos nos responden cuando les pedimos que los datos relacionados a los chequeos. Finalmente, no podemos decir que estén circulando mejores datos en el país porque existimos, pero sí que creemos que hay un grupo de políticos que está siendo más cuidadoso cuando utiliza información.
Chequeado también 'chequea' a medios de comunicación. ¿Cuál es el rol actual de un medio de comunicación en la construcción del discurso público?
El rol de los medios de comunicación en el discurso público es central, porque la opinión pública se construye no a partir de lo que los ciudadanos viven o perciben de manera directa sino de forma intermediada. Uno de los que tiene un rol central como actor o como sujeto son los medios. Puede ser que en los últimos años con la aparición de internet o las redes sociales se haya matizado el poder de los medios, pero su rol en la instalación de agenda sigue siendo preponderante.
Participaste en un taller y un debate a nivel local, ¿qué te llevas de Barranquilla?
Como conclusión me llevo que hay interés en la gente de que haya mayor acceso a la información pública y mayor transparencia. Escuché a varias personas decir que no quieren 'tragar las cosas enteras'. El público está interesado en que haya más personas despiertas con una mirada crítica, sobre todo por parte de personas con poder como los políticos, los medios y los empresarios.