Barranquilla recibe hoy la designación oficial como Capital Americana de la Cultura 2013, en acto que tiene como invitados especiales a la ministra de Cultura, Mariana Garcés Córdoba, y al presidente del Bureau Internacional de Capitales Culturales (IBOCC), Xavier Tudela.
La categoría anual de Capital Americana de la Cultura fue creada en 1998 con el objetivo de promover la integración interamericana desde el ámbito cultural, contribuir a un mejor conocimiento entre los pueblos del continente americano, respetando su diversidad nacional y regional, poniendo de relieve al mismo tiempo el patrimonio cultural común. La Organización Capital Americana de la Cultura, que hace la designación, es miembro del Bureau Internacional de Capitales Culturales. Promueve internacionalmente las ciudades capitales culturales y establece nuevos puentes de cooperación con Europa. Está acreditada ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) y tiene el reconocimiento de los parlamentos latinoamericano y europeo.
De manera que estamos frente a un promisorio acontecimiento que se suma a los logros que Barranquilla ha alcanzado como ciudad de la alegría, que se prepara para celebrar con emotividad y orgullo los 200 años de haber sido erigida en villa.
Ser Capital Americana de la Cultura significa una gran exposición internacional durante todo un año, especialmente del grupo norteamericano Discovery Networks Latin America/US Hispanic, con sede en Miami, donde se emitirá publicidad a través de sus diversos canales, que se pueden ver en Latinoamérica y en los Estados Unidos, y también del grupo español Antena 3 Internacional, con una audiencia de más de quince millones de espectadores en los países latinoamericanos y en algunos estados de los Estados Unidos. Además, se publican reportajes sobre la ciudad, promovidos por Bureau Internacional de Capitales Culturales.
A nivel local se hará la elección ciudadana de los siete tesoros del patrimonio cultural de Barranquilla. Pero tal vez lo más importante es que los eventos tradicionales culturales, más de una decena con convocatoria internacional en cada año, adquieren una dimensión especial con motivo de la Capitalidad Cultural.
El compromiso que viene, por lo tanto, no puede mirarse como responsabilidad única de las autoridades sino como oportunidad para la expresión de una voluntad colectiva de transformación de la sociedad a partir de la cultura en sus múltiples manifestaciones. La experiencia conocida de cambios en las ciudades que han sido declaradas capitales culturales conduce al optimismo. Ocurre como cuando se es sede de un evento deportivo por cuanto la atención se vuelca y queda para la historia el reconocimiento de sus valores y sus tradiciones.
Barranquilla, receptora de los grandes inventos que revolucionaron el mundo hace un siglo, posee un movimiento cultural que el mundo debe conocer. Es cuna de Shakira, fuente de creación de García Márquez y Alejandro Obregón, con un espléndido patrimonio arquitectónico, sede de uno de los carnavales más alegres y participativos del mundo, con una gastronomía internacional y criolla de gran calidad y una oferta cultural en todo el año. Ha mejorado considerablemente su oferta museística y de bibliotecas. Sin duda, tenemos mucho que mostrar.
