James Sánchez tuvo sentimientos encontrados el pasado domingo, en el Metro. De la felicidad por su golazo ante el Bucaramanga pasó a la tristeza por una lesión que no le permitió jugar la segunda parte del compromiso ante el equipo Leopardo. En el momento del remate para gol, el mediocampista barranquillero sufrió una contractura muscular que lo alejará de 12 a 15 días por fuera de las canchas. Ese fue el resultado que arrojó la ecografía que se le practicó ayer al jugador.
Desde su casa, Sánchez atendió el llamado de EL HERALDO y contó cómo se presentó la lesión. 'En el momento del gol, cuando saqué el remate, sentí un jalón fuerte. Después me quedaron varias oportunidades igual y no pude rematar pensando en que no se me fuese a reventar el musculo. Cuando se acabó el primer tiempo me hice revisar y el dolor que sentía no me dejaba seguir jugando', explicó el volante.
James aseguró que su gol no fue producto de la casualidad y que desde hace rato estaba buscándolo a través de esa vía. 'Me tenía mucha confianza, antes del juego le mostraba a Murillo los videos de los goles que había marcado anteriormente. Por la curva que toma, le doy nueve puntos de calificación a mi gol. Fue un momento lindo. Lástima que después no pudimos lograr la victoria, que era lo que realmente se quería', concluyó.