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Piscinas, juegos acuáticos, helados gratis y arcoíris con caballos. Estos son los elementos que, según los niños barranquilleros, conformarían el parque ideal para ellos en su ciudad natal.

Así lo reveló una investigación realizada por la Universidad del Norte durante más de dos años, en la cual se indagó sobre el imaginario de los infantes acerca de estos lugares de recreación en Barranquilla.

Para realizar el estudio, que fue titulado ‘Todos los ojos al parque: Una mirada al espacio público para la infancia’, alrededor de 600 personas fueron encuestadas, entre adultos y niños, los cuales frecuentan los parques de la ciudad.

El director del informe, Valmiro Narváez Goenaga, junto a estudiantes de la asignatura Juego, Lúdica y Educación del Programa de Licenciatura en Pedagogía Infantil, descubrió a través del trabajo de campo que los pequeños necesitan espacios donde puedan expresarse, dentro de un clima de control social.

El parque ideal

En esta investigación fueron entrevistados niños de cuatro a nueve años de edad, quienes se mostraron muy creativos a la hora de describir cómo sería su parque favorito.

Los elementos antes mencionados y escogidos por los pequeños para construir su parque no son más que juegos que les brindan 'más libertad para correr, tirarse y explorar el entorno', aseguró el docente Narváez.

María Camila Feliciano va a divertirse todos los fines de semana al Parque Venezuela o al Suri Salcedo, en compañía de sus padres.

Esta pequeña de 6 años de edad disfruta mucho de los juegos instalados en el Venezuela, y por eso desearía que todos los parques en Barranquilla sean como ese. 'Que haya brinca-brinca, sube y baja y columpios', describió la niña.

Pero, aunque hay varios juegos que atrapan toda su atención, María Camila manifestó que faltan muchos juegos para niños de su edad. 'Hay muchos más juegos para bebés y para las personas grandes', reiteró.

Tal como lo expresó la pequeña, el estudio plantea que un espacio público pensado para la infancia debe ser construido para que los niños de edad adecuada se sientan satisfechos de jugar libremente por el lugar.

El creador del Programa Internacional ‘Ciudad de los Niños’, Francesco Tonucci, habla del significado del juego libre. Este experto en urbanismo cree que para los niños divertirse libremente quiere decir salir de casa, jugar sin vigilancia de un adulto y decidir entre todos qué jugar.

'Esto suena complicado y arriesgado. Sobre todo en estos tiempos donde nos preocupa mucho la seguridad. Pero de fondo lo que contiene esta afirmación es el compromiso de los habitantes por convertir su ciudad en un espacio seguro, para la paz y la convivencia, pero ante todo para el cuidado y protección de la infancia', afirmó Tonucci.

El docente Narváez coíncide con el experto sobre que los parques deben ser lugares que, desde su estructura, permitan el desarrollo libre y protegido de los niños. 'Que los padres sean mediadores en un espacio donde el juego pueda ocurrir. Un lugar en el que la forma y sus componentes sean significativos para una vida en desarrollo', enfatizó el director del estudio.

El juego, para ser orientado a un buen desarrollo, necesita variedad de entornos y retos para hacerlo más rico. De lo contrario se corre el riesgo de empobrecer las experiencias lúdicas, plantea la investigación.

Luciana Castillo también visita algunos parques de Barranquilla durante los fines de semana. La pequeña de cuatro años de edad, que por lo general frecuenta los parques El Golf, Jairo Cepeda y el Venezuela, desearía tener en su ciudad un parque ecológico, en el que también tengan gran presencia los dulces.

'Que haya un lanzador de dulces con algodones de azúcar, muñecos grandes en los resvaladeros y brinca-brincas. También una fuente de chocolate. Quiero un parque con jirafas y también con elefantes. Un molino y un castillo', dijo la menor.

'Varias ciudades alrededor del mundo, conscientes de esta situación y demostrando un alto compromiso con la infancia, construyen espacios públicos donde prima las zonas abiertos, la cercanía a la naturaleza y al contexto local. Los niños quieren lugares donde rodar y donde interactuar con animales', aseguró Narváez.

Niños y ciudadanos

Además de indagar sobre el parque ideal para los niños, el informe de Uninorte habla acerca de los pequeños vistos como ciudadanos.

En este punto, la Convención sobre los Derechos del Niño es citada en la investigación. En ella se reconoce a los pequeños como ciudadanos desde que nacen, y uno de sus derechos es la posibilidad de aprovechar los espacios públicos como cualquier otro habitante de la ciudad.

'Los niños en el Suri Salcedo nos preguntaban por qué habían muchas zonas que dicen: no pisar. ¿Entonces para qué pusieron plantas? Si no podemos meternos ahí', contó Narváez, sobre lo que le preguntaron los niños encuestados.

Según este investigador, mientras la administración y los adultos se preocupan por la seguridad en el parque, los niños desean apropiarse de todo su entorno.

Chris Yoel Mendoza se imagina un parque que esté dividido en tres ambientes. Al niño de nueve años le molesta que en la ciudad 'hayan pocos parques y sean muy pequeños', y espera algún día encontrar un espacio que tenga 'un bosque donde pueda pasear a las mascotas, un parque de diversiones y otro de juegos acuáticos', describió.

Aunque la madre de Chris, Yesenia Barrios, también quisiera para su hijo un amplio parque con zonas verdes y atracciones, también se preocupa por la seguridad del lugar.

'Debe tener personal capacitado para servir de guía a los niños en los juegos. También que estén preparados en primeros auxilios y en caso de cualquier otra emergencia en el parque', enfatizó Yesenia.

'Los padres parecen tener mucho miedo por el parque y eso hace que el niño esté perdiendo espacio de alguna forma', aseguró Narváez, y continúa explicando que una de las causas de la generalizada preocupación de los padres es la ubicación de estos lugares en Barranquilla. 'La mayoría de parques en la ciudad se encuentran sobre calles muy transitadas', reiteró.

Pistas de autos, un tanque de lego, fichas muy grandes como edificios, un árbol de cientos de dulces y un cartel luminoso, como pantallas de peliculas son los elementos que Matías Dossetti, de cinco años, quiere disfrutar en un parque como el de El Glof o el Venezuela, los cuales visita con sus padres en sus ratos libres.

A diferencia de los padres, los niños sienten inseguridad por encontrarse rodeados de muchos adultos, dice el estudio. 'Los niños nos decían que les daba miedo que habían muchos adultos solos alrededor de ellos', dijo Narváez.

Para el investigador uno de los ejercicios más interesantes durante la realización del estudio fue comparar las respuestas entre adultos y niños.

'Vemos como la infancia mantiene una visión más esperanzadora, con proyección y creativadad. Mientras que el adulto parece haber perdido la capacidad de asombro y se enfoca en las partes negativas de lo que observa en el parque', detalló Narváez.

Más conclusiones

La conclusión más importante a la que llegó el trabajo de campo fue que la inversión que está realizando la Alcaldía de Barranquilla con la recuperación, conservación y reconstrucción de los parques está enfocada en la 'creación de espacios para el deporte y para el excesivo control del juegos infantiles'.

Es una aseveración fuerte, aceptó Narváez. Pero el estudio busca analizar si la administración está teniendo en cuenta la opinión o gusto de los niños -principales beneficiario de los parques- al momento de recuperar el espacio público.

Para el director del proyecto los parques de la ciudad no cumplen con los principios expuestos por expertos y comprobados en las ciudades con alto nivel de participación ciudadana.

'Estas ciudades conciben los parque como una posibilidad para promover la infancia desde una categoría social relevante, y como punto de referencia para la distribución del espacio y la construcción de la ciudad'.

Según el investigador, ‘Todos los ojos al parque: Una mirada al espacio público para la infancia’ continuará desarrollándose en el campo de la ciudad y desde el aula. 'Enriqueceremos el estudio semestre a semestre con las experiencias recolectadas por los estudiantes', finalizó Valmiro Narváez.

Conversatorio: Hablan del parque y sus aportes

La investigación ‘Todos los ojos al parque: Una mirada al espacio público para la infancia’ es publicada en el marco de la realización de un conversatorio que lleva su mismo nombre y en el que especialistas debatirán sobre los parques, vistos desde sus aportes a la arquitectura, la academia y la gestión social.

El arquitecto y director del Equipo Mazzanti, Giancarlo Mazzanti, y Ying-Yu Hung, también arquitecta y docente de la Universidad de California, Estados Unidos, son los invitados especiales del Instituto de Estudios de Educación de la Universidad del Norte, para presidir este encuentro que se llevará a cabo el nueve de junio, desde las 8 hasta las 12 p.m.

El evento, también organizado por la Escuela de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la institución, contará además con la participación de expertos locales como lo son: el gerente de Foro Hídrico de Barranquilla, Alberto Salah; Valmiro Narváez, docente y director de la investigación a tratar; y Carlos Javier Velázquez, director de Urbanum y docente de Derecho de Uninorte.