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Es innegable que entre la sociedad cada día crece la preocupación por llevar un estilo de vida más saludable, a través del ejercicio y una correcta alimentación.

Esta tendencia hace que cada vez sea más común ver, tanto en la vida real como en redes sociales, la proliferación de recetas hechas a partir de ingredientes poco comunes pero más sanos.

Esta práctica, llamada sustitución de ingredientes, permite la elaboración de platillos que mantienen el sabor de sus versiones originales, pero con bajos niveles de grasa, sal, azúcar y carbohidratos, haciéndolos ideales para gente que quiere bajar de peso, diabéticos, veganos (personas que no consumen nada de origen animal) y en general para quienes deseen alimentarse sanamente.

'La sustitución de ingredientes es todo un proceso que implica mucho ensayo y error, porque la idea es conseguir, con un ingrediente distinto al que sale en una receta, el mismo efecto que el original', explica Marcela González, psicóloga y repostera que se dedica a la elaboración de postres saludables y aptos para veganos.

Marcela cuenta que al sustituir un ingrediente por otro en una receta, especialmente en el caso de la pastelería, 'se necesita que cumpla las mismas funciones, si no, no tiene caso. Es el arte de aprender cuáles son las funciones de cada ingrediente en una receta para poder encontrarle los sustitutos'.

De esa forma, pueden hacerse, por ejemplo, brownies, flan, galletas, tortas, pan, muffins y cupcakes, todo dietético.

'La gente reemplaza la leche de vaca por leche de coco, el azúcar por stevia o agave, la sal por mezclas de condimentos, el queso de vaca por queso de almendras, el arroz por quinua, pastas tradicionales por pastas libres de carbohidratos, etc.', apunta Gina Mercado, quien junto a su novio, Jean Claude Borelly, son propietarios de Fit Choices, un establecimiento ubicado en el centro comercial Miramar que vende una amplia variedad de productos orgánicos, libres de gluten y azúcar.

'La idea surge por la necesidad que tiene Barranquilla de un lugar donde puedas encontrar opciones saludables. Arrancamos con la idea en julio del 2013 y abrimos la isla en enero de este año', cuenta Gina. La gran popularidad y demanda de este tipo de ingredientes en la ciudad se refleja en los más de cuatro mil seguidores que tiene Fit Choices en su cuenta de Instagram, a menos de tres meses de su apertura.

Pero esta tendencia no es económica. Aunque es más común encontrar leche y bebidas de soya, la leche de almendras y la de coco, por ejemplo, que se consiguen solo en algunos almacenes de cadena, son más costosas que la leche tradicional. Igual es el caso de la harina de almendras.

Sin embargo, es posible encontrar estos productos a un menor precio en establecimientos especializados o incluso, haciendo pedidos a distribuidores que se promocionan a través de Internet.

'La gente muchas veces se frena al encontrar estas recetas porque piensan que todo es demasiado caro. Sí, en los supermercados sale todo más costoso, pero si buscas a los distribuidores vas a conseguir precios más cómodos', opina Marcela González. 'Pienso que la gente tiene que estar más abierta a estos temas, invertir un poco más en buena comida para luego no tener que invertir en el médico', considera.

Aunque recientemente ha ganado notoriedad, la sustitución de ingredientes no es precisamente un tema nuevo. El restaurante vegetariano El Huerto, fundado en 1986 por Manuel Herrera, utiliza y vende este tipo de productos desde hace años.

'Es un fenómeno interesante. Definitivamente el crecimiento de las redes sociales ha ayudado mucho a que se expanda esa información, y la gente se siente más confiada al ver que muchas más personas están acompañándolos en esa idea de comer sano', dice Herrera.

Para él, es vital escuchar lo que dice el cuerpo. 'Uno a veces simplemente come por satisfacer el paladar y no para estar nutrido y sentirse bien'.

Es la nutrición el punto clave en esta práctica. 'Esto tiene un efecto 100% positivo en la salud', sostiene la doctora Ana Cecilia Rondón Tovar, nutricionista y dietista. 'Consumir, por ejemplo, edulcorantes saludables como agave, stevia y miel de abeja es excelente para la salud. Tienen los nutrientes que nos ayudan a cumplir con todas nuestras funciones naturales sin producir enfermedades como la diabetes', explica.

Añade que las leches vegetales (de ajonjolí, alpiste, soya y coco) proporcionan nutrientes para el cerebro humano y las células, y ayudan a su correcto funcionamiento. Además, las almendras, vitales en estas recetas, no tienen grasas saturadas ni aumentan el nivel de colesterol ni los triglicéridos. 'Es un vegetal que tiene minerales, proteínas, vitaminas y ácidos grasos esenciales para la vida', sostiene.

'Muchas veces la gente se cohíbe con solo decirles que la receta es libre de azúcar y a base de leche y harina de almendras; eso les hace un bloqueo. Tienen que arriesgarse y probar, se están perdiendo de una opción diferente, porque lo saludable no es feo, simplemente se necesita tener algo de creatividad', finaliza Gina Mercado.

Sustitutos

Ingredientes que pueden ser sustituidos por algunos más saludables.

Leche de vaca: leche de soya, de almendras, de coco, de ajonjolí, de alpiste.

Harina de trigo: harina de almendras, de coco.

Huevo: banano, auyama, remolacha, ñame, semillas remojadas de chía y linaza.

Sal: Especias como perejil, pimienta, albahaca, entre otras.

Queso de vaca: queso de almendras, de soya.

Arroz: quinua.

Azúcar: stevia, agave, miel de abejas.

Brownies de Quinoa

Ingredientes

Para 8-10 porciones

1 taza de quinoa cocida

3/4 de taza de panela molida

1/2 taza de cocoa

3 cucharadas de leche

1 cucharadita de extracto de vainilla

1/2 cucharadita de polvo de hornear

1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio

1/2 cucharadita de sal

2 aguacates hass (de los pequeños) maduros

2 huevos

Preparación. Precalentar el horno a 200ºC. Revolver el huevo, la vainilla y la leche, procesar hasta integrar. Añadir el aguacate previamente machacado junto con la quinoa y batir hasta lograr una mezcla homogénea. Añadir la panela, la cocoa, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal, integrar todo. Vertir la masa en moldes individuales previamente engrasados. Llevar al horno por 45 minutos. Introducir un palillo en uno de los brownies, si sale limpio ya está listo para sacar del horno. Dejar enfriar y disfrutar.