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Leer es crecer. La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria, en el Día del Libro, fomenta este hábito y lo recomienda desde la infancia para ayudar al cerebro a desarrollarse con los miles de beneficios que ofrece

Dos elementos tan esenciales como lectura y escritura repercuten de forma muy positiva en el rendimiento académico de los niños y en su comprensión lectora. En el Día del Libro, los pediatras de atención primaria recuerdan la importancia de estos hábitos para favorecer el desarrollo cognitivo desde la infancia.

La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) apoya la campaña de promoción de la lectura que ha iniciado y que pone a disposición de los padres el decálogo 'Derecho de los niños a escuchar cuentos'.

Se han puesto al alcance de las familias diversos recursos, como cuentos y libros, con el mismo objetivo de colaborar con el aprendizaje y la estimulación infantil.

Leer mejora la capacidad y el progreso lingüístico de los más pequeños. De hecho, cuanto antes se coge un libro, mejor es su habilidad en ese sentido. 'La lectura permite a los niños aprender las palabras con mayor rapidez, mejora su comprensión y ejercita su cerebro para la adquisición del lenguaje, que se produce entre los 10 y los 30 meses, sea lo más rica posible', afirma la doctora Begoña Domínguez, presidenta de la AEPap.

Las áreas cognitivas del cerebro se estimulan con la lectura y los aspectos emocionales de nuestro desarrollo también evolucionan favorablemente con un libro entre las manos.

Hay que añadir que algunos tipos de lecturas impulsan a los padres a solventar problemas que surgen del desarrollo personal de sus hijos, por ejemplo, muchos cuentos tratan temas como el control de esfínteres, el miedo a la oscuridad o los celos de los hermanos.

Además, según datos del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, el 79% de las familias con niños menores de seis años les leen en casa tres horas a la semana de media y el 84,7% de los niños entre seis y trece años leen libros que no son de texto durante más de tres horas semanales.

En cuanto a los nuevos soportes, actualmente el 46,6% de los niños de 13 años lee en formato digital, la mayoría de ellos en el ordenador; y un 81,1% utiliza Internet para buscar información.

La pediatría se implica en el fomento de la lectura

'Es un método estupendo para mejorar el aprendizaje de los niños, su desarrollo y su maduración; ayuda en su desarrollo cultural y en su maduración psicoafectiva', señala Esther Serrano, pediatra de AEPap.

Los profesionales hacen un recordatorio: cualquier tipo de libro puede ser bueno para la educación y el desarrollo de los pequeños de la casa. Además, subrayan que es bueno dejar que ellos elijan sus libros preferidos y tengan sus propios gustos.

'La falta de interés por los temas impuestos puede generar apatía y rechazo ante la lectura, por lo que es conveniente dejarles escoger', explica la doctora Serrano.

La implicación de los pediatras y los enfermeros pediátricos en estas recomendaciones, que se suman a los maestros y bibliotecarios, es muy valiosa, ya que, mucho antes de ir al colegio, los bebés acuden a la consulta del pediatra y sus consejos pueden contribuir a adelantar la implicación de los padres en el desarrollo del lenguaje de sus hijos, principalmente con la lectura en voz alta.

Los niños tienen derecho a escuchar cuentos

El mes de la lectura hace que la página web www.familiaysalud.es ponga a disposición de los padres un decálogo informativo bajo el lema 'El derecho de los niños a escuchar cuentos', en el que se hace referencia a los beneficios de la lectura diaria desde la infancia.

Esta iniciativa recopila algunos de los autores de cuentos infantiles imprescindibles para los padres y habla del derecho de los niños a desarrollar sus capacidades imaginativas gracias a ellos.