Son las 8:50 de la noche y, aunque una brisa fría recorre el lugar, un bebé de tan solo seis meses espera con tranquilidad a que termine su aparición de la escena.
Se trata del niño Jesús en la Loa de los Santos Reyes Magos de Baranoa, una tradición que lleva cerca de 150 años y que tuvo lugar en la plaza central del municipio el pasado sábado.
Entre el público se abren paso Melchor, Baltasar y Gaspar, este último representado por Víctor Sierra, de 74 años de edad. Más adelante aparecen en escena las bellas doncellas del rey Herodes, unas 10 jóvenes danzantes entre los 15 y 18 años.
Sentados frente a la tarima están atentos los cientos de niños que llegaron al parque central del municipio, quienes se muestran gozosos de apreciar el talento de sus coterráneos, pero también se burlan de pequeños errores que surgen en la marcha de la presentación, que tiene un duración de alrededor de 2 horas.