La Policía del Atlántico evitó que un grupo de habitantes del municipio de Polonuevo atentara contra un puercoespín que caminaba por la carrera 9 con calle 2, del barrio Tamarindo.
El animal, que se encuentra en peligro de extinción, estaba desorientado y nervioso ya que varias personas alcanzaron a golpearlo porque, según ellos, era un peligro para la seguridad de la comunidad.
Afortunadamente miembros del grupo de Protección Ambiental y Ecológica de la Policía del Atlántico llegaron al sitio, protegieron al puercoespín, lo pusieron a salvo y luego lo liberaron en su hábitat natural, lejos de las personas que le iban a hacer daño.
Al parecer el animal salió a la zona habitada por la soledad de las calles en esta época de aislamiento obligatorio a causa de la COVID-19.
La Policía Ambiental y Ecológica hizo un llamado a la ciudadanía para no maltratar a los animales salvajes y llamar a la línea 123 para que personal idóneo los recupere y luego sean liberados en su ambiente.
'La ley 1774 establece que los actos dañinos y de crueldad contra los animales, que no causen la muerte o lesiones que afecten de manera grave su salud o integridad física, serán sancionados con multas de 5 a 50 salarios mínimos legales mensuales vigentes, y matar un animal salvaje o domestico puede acarrear una pena de prisión de 12 a 36 meses y multas de 5 a 60 salarios mínimos', advirtió la Policía Ambiental.