El proyecto de recuperación del Canal del Dique parece que dejó de ser una iniciativa soñada por unos pocos para convertirse en una realidad. O por lo menos eso es lo que se deduce de los avances que ha tenido este plan desde que la Vicepresidencia de la República asumió la tarea de reorientarlo para llevarlo a feliz término.
Los pasos más importantes que se han dado con el proyecto APP Restauración de los Ecosistemas Degradados del Canal del Dique se conocieron esta semana, luego de que el presidente de la República, Iván Duque, anunciara que una de las prioridades de su gobierno es el proyecto del Canal del Dique.
De hecho, agosto será un mes clave para el proyecto si se tiene en cuenta que el Banco Mundial entregará en este periodo las recomendaciones sobre la estructuración técnica propuesta, los avances en estudios económicos y financieros y los aspectos ambientales y sociales. Además, se tiene previsto que la ANI comience el proceso de consultas previas con las comunidades.
La vicepresidente de la República, Martha Luría Ramírez, le dijo en exclusiva a EL HERALDO que la precalificación comenzó el 23 de junio pasado, cuando se publicó el ‘Cuarto de Datos’ que contiene la información de carácter técnico del proyecto y las condiciones y requisitos que deben cumplir las firmas dispuestas a presentar sus 'manifestaciones de interés' en la audiencia de cierre que se llevará a cabo el 16 de diciembre.
La Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) informó en un comunicado de prensa que con el inicio de esta etapa las firmas interesadas podrán participar en el proceso a través del sistema de precalificación publicado en el Secop como en la página web de la ANI.
En este periodo se incluye una etapa en la que se pueden realizar preguntas relacionadas con el proyecto, lo que ayudará a los interesados a aclarar las dudas y a recoger las sugerencias o mejores prácticas para llevar a cabo este proyecto que es inédito para la ingeniería colombiana en la época moderna.
Después de la etapa de evaluación de los requisitos habilitantes, publicación de informes y respuesta a las observaciones que planteen los interesados, se llevará a cabo la audiencia de conformación de precalificados, la cual se realizará el 26 de febrero de 2021. En esta fecha se define la lista definitiva de los interesados que podrán participar en el proceso de licitación.
Paralelo a la precalificación se realizará un panel de expertos en el que, con base en su experiencia, se acotarán los riesgos que se identifiquen, en especial en temas fluviales, que también aplicarán al proyecto de asociación público privada que se adelanta para el río Magdalena.
Este panel permitirá hacer cuantificación de los riesgos en ausencia de información histórica en Colombia y determinar los sobrecostos que se pueden dar en este tipo de proyectos.
Terminado el proceso de precalificación y con las aprobaciones del Ministerio de Transporte, el Departamento Nacional de Planeación, el Ministerio de Hacienda y Crédito Público y del Confis se espera abrir el proceso de licitación en el primer semestre de 2021.
La ministra de Transporte, Ángela María Orozco, ha dicho que 'el Gobierno nacional avanza en la consolidación de proyectos de infraestructura que benefician a los colombianos. En este caso, 20 municipios de tres departamentos, Bolívar, Sucre y Atlántico, tendrán una obra que garantizará la navegabilidad, pero que además traerá conectividad y progreso a la región'.
El proyecto
El megaproyecto, que tiene una inversión de 2,8 billones de pesos, busca la regulación activa del ingreso de caudales al Canal del Dique y el mejoramiento de la navegabilidad entre la bahía de Cartagena y Calamar, en la ribera del río Magdalena, a lo largo de 117 kilómetros.
Las obras contemplan la construcción de dos sistemas de esclusas (Calamar y Puerto Badel), compuertas (Calamar) y obras de interconexión entre Ciénaga – Canal, a lo largo del Canal del Dique, desde el río Magdalena hasta las ciénagas de Barbacoas y Cartagena.
El proyecto cuenta con el acompañamiento del Banco Mundial, mediante una cooperación de asistencia técnica no reembolsable, que permite desarrollar un proyecto más robusto.
Las intervenciones proyectadas en este proyecto facilitarán la navegabilidad y el transporte de personal y productos medianos/pequeños, mediante embarcaciones convoy de diseño de 3x2 - barcazas con dimensiones de 232m de largo (eslora) por 32m de ancho (manga), las cuales podrán transportar hasta 7.200 toneladas de carga, que es equivalente a 206 tractomulas de 35 toneladas cada una.
En Bolívar, el proyecto tendrá influencia directa sobre los municipios de Calamar, Arroyo Hondo, Mahates, Arjona, María la Baja, Cartagena, San Estanislao, Turbana, Turbaco, Soplaviento y San Cristóbal.
Mientras que en el departamento del Atlántico se beneficiarán Campo de la Cruz, Candelaria, Sabanalarga, Santa Lucía, Suan, Repelón, Luruaco y Manatí. Y en Sucre pasará por San Onofre. En total, la población beneficiada será de 1.5 millones de habitantes.
La ANI estima que se generarán 7.600 empleos directos e indirectos entre 2023 y 2028, y se contempla que la mayoría sean personas contratadas en la zona de influencia del proyecto.
Lo que sí es una novedad es que el SENA, en el marco del Pacto de la Infraestructura, está estructurando módulos para entrenar personal colombiano en las tecnologías y procesos que se manejan en el modo fluvial.
El objetivo de la intervención del Sena es que cuando el concesionario esté buscando especialización técnica en lo fluvial encuentre la experticia en las poblaciones de la zona de influencia del proyecto y no la busque afuera del país.