Compartir:

Luego de la queja que hizo pública el sacerdote Roberto Rodríguez, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de Chiquinquirá en la Avenida Murillo, sobre un cobro excesivo por parte del antiguo operador del servicio de energía logró un acuerdo con la empresa Air-e.

A raíz del eco que tuvo el caso en los medios de comunicación, el sacerdote fue contactado por el Gerente General de Air-e, ingeniero John Jairo Toro, quien se apersonó de su caso.

'El gerente Jhon Toro me llamó y me dijo que estaba dispuesto a ayudarme a solucionar esta situación. Esta semana se comunicaron conmigo y tuve una reunión con ellos, logrando regular la situación', afirmó el sacerdote.

El sacerdote agradeció que se pudo dar una solución que le permitiera continuar con el normal funcionamiento de su iglesia, sin la presión de una deuda acumulada.

'Quiero agradecer muy especialmente a la empresa y al gerente; empezaron con el pie derecho y ojalá sigan así, porque uno nota que en realidad nosotros los usuarios somos muy importantes para Air-e', añadió el padre Roberto Rodríguez.