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Un 8 de diciembre atípico. Lo que usualmente sucede en una fecha como la de ayer en las playas de los municipios aledaños, este año no ocurrió. A comparación de años anteriores, pocas personas llegaron hasta Puerto Colombia, para darse un chapuzón como parte del famoso plan 'desenguayabe' de las fiestas decembrinas.

En un recorrido realizado por EL HERALDO se pudo evidenciar poco flujo de carros y visitantes llegando a disfrutar las distintas playas del departamento. Las personas acataron las medidas emitidas por las distintas autoridades y evitaron aglomerarse en estos lugares.

Quienes asistieron lo hicieron bajo el estricto cumplimiento de las medidas de bioseguridad, con el fin de pasar un rato 'agradable' salvaguardando la vida e integridad de las personas. Desde controles en las entradas de las distintas vías de acceso para establecer el aforo, toma de temperatura, registro de datos y desinfección, hasta el distanciamiento entre cada caseta y el uso obligatorio del tapabocas durante la estadía fuera del mar, tuvieron que realizar los asistentes.

Para los visitantes este día no dejó de ser completamente diferente, 'un 8 de diciembre atípico, no es normal, se ve muy tranquila la playa. Nosotros somos turistas locales, vivimos en Puerto Colombia y vinimos a pasar un día de playa, la idea es compartir, descansar, desestresarnos un poco y estar en familia. Los protocolos se están cumpliendo a cabalidad', dijo Alberto Teherán, un turista que llegó a las playas de Salgar en compañía de su núcleo familiar.

Giovani Ramos, otro asistente a las playas, contó que se asesoró antes de asistir sobre las medidas que estarían rigiendo para acceder a las playas, ya que, es un 'hobby' para él y su familia asistir después de las festividades como plan para desestresarse y compartir.

'Estoy con mi familia disfrutando de la tranquilidad de la playa, en un ambiente sano y salvaguardando la seguridad primero que todo con todos los protocolos de bioseguridad, nosotros mismos tenemos que implementarlos y cuidarnos', expresó Ramos.

Algunos de los visitantes esperaban encontrarse con alta afluencia de personas, pero fue todo lo contrario. Tal es el caso de Néstor Padilla, quien asistió con su familia como es costumbre y no pensó que iba a encontrar un lugar tan 'calmado' y despejado como estuvo el día de ayer.

'Vine con mi familia a pasar un rato agradable en la playa, ha sido un día tranquilo, se esperaba más multitud pero ha estado tranquilo. Ha sido diferente por la pandemia pero hemos tratado de manejar bien los protocolos, nos sentimos seguros y se ve mucha vigilancia, la policía colabora bastante', manifestó Padilla.

Por su parte, los caseteros se mostraron complacidos con el buen comportamiento de los visitantes frente a las medidas y las recomendaciones dadas.

'Con el cumplimiento del funcionamiento del protocolo de seguridad, estamos haciendo distanciamiento entre cabañas, el aforo del turismo, máximo 4 personas por mesa. Buen comportamiento de los turistas. Le pedimos al turismo que se comporte y evitar cierres, medir la distancia dentro del agua, aceptar lo que dicen los salvavidas y cumplir los protocolos', indicó Miller Bandera, trabajador de un restaurante en las playas de Salgar.