En el departamento, las autoridades acordaron la implementación del toque de queda y la ley seca durante este puente festivo. En concordancia, para las playas del Atlántico se adoptaron medidas para evitar la propagación de la Covid-19 por la aglomeración de personas.
Las alcaldías de Puerto Colombia, Juan de Acosta y Tubará han dispuesto de protocolos de bioseguridad, aforo y operativos con su personal y acompañamiento de la Policía para que la estadía de las personas en los balnearios sea segura y en orden.
Leonel Morrón, secretario de Gobierno de Puerto Colombia, explicó las restricciones que hay para el ingreso a las playas del municipio. En tal sentido recordó que el horario comprende de las 7:00 a. m. hasta las 4:00 p. m.
Indicó el funcionario que en las playas se verificará el cumplimiento de las cotas máximas de capacidad de aforo; en caso de completarse el número máximo, la autoridad municipal procederá a impedir el ingreso de más personas.
Igualmente se prohíbe el ingreso de bebidas alcohólicas, alimentos preparados y plásticos de un solo uso (desechables) en el sector de las playas.
El funcionario fue enfático al indicar que las personas que deseen entrar al sector de playas del municipio deberán colaborar en el procedimiento de toma de temperatura y registro de visitantes, quienes no accedan a dicho procedimiento no podrán ingresar a las zonas de playas.
'Los prestadores de servicios turísticos deberán acatar todos los protocolos de bioseguridad, lineamientos, orientaciones y medidas de bioseguridad expedidos por las autoridades nacionales, departamentales o del municipio', dijo.
En Juan de Acosta
El aforo de bañistas en las playas de Juan de Acosta es de 600 personas, según indicó el secretario de Gobierno de este municipio, Juan David Rojas.
El funcionario aseguró que 40 personas –entre agentes de la Policía, Tránsito y el equipo de la Alcaldía– verificarán que se cumplan estas disposiciones.
De acuerdo con el funcionario, no se permitirá el ingreso, expendio ni consumo de bebidas alcohólicas y los restaurantes funcionarán con el 50% de su capacidad normal.
'Nuestra gente en Juan de Acosta se ha preparado por meses con todas la medidas de bioseguridad para recibir a los turistas, los estamos esperando para que disfruten nuestras playas y bioseguridad', puntualizó el secretario de Gobierno.
Tubará
Entre tanto en Tubará, al igual que los demás municipios, se acogió al toque de queda nocturno. Personal de Policía de Turismo, la Secretaría de Gobierno y la Policía adscrita a la subestación Playa Mendoza realizarán operativos de control desde las 8:00 a. m. en las playas, para hacer cumplir con las medidas.
Martín Rolong, secretario de Gobierno del municipio, dijo que 'debido a la pandemia y las medidas adoptadas en el departamento el personal de Policía turística se ha reducido, por eso hemos dispuesto de las secretarías de Gobierno y de Desarrollo del municipio para recibir a los bañistas y cumplir con las medidas adoptadas', explicó el funcionario.
El secretario hizo énfasis en que no se permitirá el ingreso a playas de buses con paseos.
La Policía dispuso de la línea de emergencia 123 en la que se atenderá cualquier requerimiento de parte de la comunidad. Desde el viernes, cuando inició el toque de queda en el departamento, están en funcionamiento las actividades de prevención, control y disuasión por parte de sus uniformados.
'La Policía de Turismo dispuso de puntos estratégicos, especialmente aquellos lugares que reúnen ciudadanos para descansar y celebrar como balnearios, playas entre otros, con el fin de garantizar la seguridad y tranquilidad', cerró.
Controles en vías
Las dependencias de Tránsito y Transporte en el Atlántico, así como de la Policía Metropolitana y departamental, han dispuesto de toda su logística y personal para garantizar orden y seguridad en la movilidad vial durante este puente festivo cuando se estarán desplazando cientos de viajeros por nuestras vías.
En Barranquilla, la Mebar habilitó 13 puestos de prevención en las diferentes salidas y entradas a la ciudad para orientar a los viajeros, así como prevenir el ingreso y salida de quienes no justifiquen la estadía en el sitio de destino.
Tanto para las actividades de éxodo como de retorno se han implementado controles de alcoholimetría, control a los límites de velocidad y la documentación de los vehículos, según explicó el coronel John Mirque, comandante de tránsito de la Policía Metropolitana.
El año pasado para el Puente de Reyes ingresaron a la ciudad 73.845 vehículos y salieron 80.644 más. Debido a la situación que se vive en el territorio por causa de la pandemia, se estima que este número se reduzca entre 25 y 30 por ciento, aseguró el coronel Mirque.
A su turno, el coronel Oleskyenio Flórez, comandante operativo de la Mebar, sostuvo que 'se ha dispuesto un acompañamiento de 1.500 hombres con todo un componente tecnológico y las capacidades institucionales con el fin de hacer que los ciudadanos cumplan con las medidas que se están adoptando'.
Para la directora del Instituto de Tránsito del Atlántico, Susana Cadavid, quien trabaja en coordinación con la Policía departamental, es de vital importancia que los viajeros sigan las recomendaciones de las autoridades, pues uno de los objetivos de esta dependencia es reducir al máximo los accidentes en las vías del Atlántico.
Por su parte, la Terminal Metropolitana de Transporte de Barranquilla y el aeropuerto, tras recalcar que el transporte no aplica para las restricciones, hicieron un llamado a los viajeros para que lleguen con tiempo anticipado a la hora del viaje, que verifiquen que sus documentos y tiquetes de viaje o pasajes estén en regla y que cumplan con las medidas de bioseguridad.