Las oportunidades para la formación de la juventud poco a poco están saliendo a flote con la inversión en educación. En el departamento del Atlántico son varias las sedes del Sena y Centros de Desarrollo Juvenil que brindan, a esta población, posibilidades para salir adelante.
Angella Cantillo es prueba de ello. Con tan solo 15 años tiene claro lo que quiere para su vida y cómo lo va a conseguir. Actualmente se encuentra estudiando patronaje de prendas de vestir en el Sena, al tiempo que termina su bachillerato en una institución educativa del municipio de Baranoa.
La joven empezó su formación en este oficio debido a que su colegio es de carácter técnico-industrial. Al presentarle los distintos talleres que ofrecían, se decantó por este ya que desde niña le ha gustado hacer manualidades, bordar y tejer, entre otras actividades.
Para ella la pandemia no ha sido impedimento para seguir fortaleciendo sus conocimientos. La virtualidad se convirtió en su mejor aliada para continuar su proceso de aprendizaje, que se ha extendido por varios meses.
En este momento, la meta inmediata que trata de cumplir es lograr un buen puntaje en las pruebas Saber para acceder a una beca en la Universidad del Norte para estudiar administración de empresas.
'La idea es poder formar una empresa de confecciones, esa es la meta y por eso estoy estudiando mucho para lograrlo', dijo.
Sostuvo que su madre ha sido su principal apoyo en este proceso: 'Ella se siente orgullosa por lo entregada que soy y siempre me ha apoyado'.