Debido al incremento del nivel de las aguas en el Embalse del Guájaro, se mantiene la preocupación entre los habitantes del corregimiento de La Peña, en Sabanalarga, ante las altas probabilidades de riesgo por desbordamiento del cuerpo de agua.
El fenómeno empezó a presentarse durante la segunda temporada de lluvias en la región. Sin embargo, en las últimas semanas, fue reconocido como una situación de 'riesgo inminente' para las comunidades ribereñas al Guájaro.
De acuerdo con Jaime Polo, líder del corregimiento de La Peña, el problema se agudiza cada día en el sector, debido a que el embalse está alcanzando el nivel máximo de resistencia, que es 5.20 metros sobre el nivel del mar.
'En el corregimiento estamos presenciando cómo incrementa a diario el nivel del embalse. A pesar de que las lluvias han mermado estos días, estamos preocupados porque el embalse está alcanzando su cota máxima', expresó Polo.
Del mismo modo, José Ariza, líder comunitario de La Peña, expresó su preocupación y agregó que, a pesar de que la Gobernación del Atlántico esté llevando a cabo acciones de prevención de riesgo, la comunidad difiere de algunas de las medidas próximas a implementar.
'La gobernación propuso instalar sacos rellenos de material seleccionado en algunas bocacalles cercanas al embalse, pero eso podría desatar otros problemas. En caso de fuertes lluvias, se nos represaría el agua en las calles del municipio. Es decir, también nos inundaríamos', dijo Ariza.
Acciones de prevención. Desde el Consejo Municipal de Prevención y Atención de Desastres, liderado por Jorge Manotas, alcalde de Sabanalarga, se llevó a cabo una caracterización de las viviendas con posible riesgo de inundación, dando como resultado un número de 137 viviendas en la calle 3 de La Peña.
Asímismo, por parte de la Subsecretaría de Gestión del Riesgo del departamento, se enviaron 200 colchonetas y 3.000 sacos, que están siendo rellenados con material seleccionado y serán instalados en las zonas donde se incrementa el caudal del agua.
Esta acción estará acompañada de una bomba hidrosanitaria, con el objetivo de evacuar el agua, producto de los desagües de las calles adyacentes.
Por otro lado, el alcalde agregó que, en complemento de las medidas antes citadas, también se programó que la Institución Educativa de La Peña funcionaría como albergue temporal ante una eventual inundación.
A su vez, la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (CRA), ha emitido alertas referentes al incremento del nivel de las aguas en el embalse, principalmente en La Peña, por ser este uno de los corregimientos topográficamente más bajos de la ribera y, consecuentemente, uno de los más vulnerables ante una eventual inundación.
La corporación reiteró que es indispensable continuar haciendo seguimiento a la situación y mantener activos los comités de prevención y atención, debido a que, durante la segunda ola invernal, aumenta el flujo de los más de 20 arroyos que discurren en el embalse.
De acuerdo con la entidad, actualmente, el nivel del embalse se mantiene en un nivel aproximado de 5.10 metros sobre el nivel del mar.
