Durante el mes de febrero, Barranquilla y demás municipios del Atlántico han estado en alerta debido a los fuertes vientos, fenómeno que ha generado afectaciones en varios sectores debido a la caída de paredes y techos, así como el desplome de varios árboles.
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El hecho más reciente ocurrió en la noche del martes en la plaza Cisneros del municipio de Puerto Colombia, frente al antiguo muelle. En este punto, varias láminas que cubren algunas estructuras de la plazoleta se levantaron a causa de las fuertes brisas que se vienen registrando. Por fortuna este incidente no dejó personas lesionadas.
Ante este incidente, la Dirección Marítima General reiteró que se mantiene vigente la alerta por los vientos causados, en su mayoría, por la interacción de sistemas de alta y baja presión en el centro del litoral Caribe colombiano.
Según el reporte de la entidad, los vientos pueden alcanzar intensidades de 20 a 30 nudos (37 a 55 Kilómetros por hora). Esta situación también favorece a que las olas aumenten su tamaño llegando a alturas que oscilan entren 2.5 y 4.0 metros.
Asimismo, la autoridad marítima indicó que las principales jurisdicciones afectadas son Puerto Bolívar, Riohacha, Santa Marta, Barranquilla, Cartagena, Coveñas, Turbo, San Andrés y Providencia.
'Se recomienda extremar las medidas de seguridad en el desarrollo de las actividades marítimas', añadió la Dimar.
Con relación a los bañistas y embarcaciones menores se mantienen los protocolos que se han venido implementando, el cual consiste en el reporte a la torre de control antes y durante la navegación. A los bañistas se sugiere acatar las recomendaciones que hacen las autoridades en las playas, igualmente evitar el consumo de bebidas embriagantes.
