Con un ritual de armonización y sanación realizado por las comunidades indígenas asentadas en el Atlántico, se conmemoró el Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Victimas del conflicto armado que tiene como objetivo honrarlas y dignificar las como sujetos de derecho.
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El evento se llevó a cabo en el Gran Malecón en el sector Puerta de Oro y contó con la presencia de comunidades de Bolívar, Magdalena, La Guajira, Córdoba, entre otras, que desde hace más de 20 años residen en Barranquilla y su área metropolitana tras ser desplazados de sus territorios por la violencia.
Julio Tapia, indígena Zenú, expresó que para poder avanzar en los procesos de reconciliación y perdón, es necesario sanar las heridas y dejar atrás la tristeza por las experiencias vividas.
'Cada uno de nosotros debemos soltar ese odio hacia las personas que nos hicieron daño y dejaron sembrados en nosotros un sentimiento de odio y rencor. Esta es la única manera en la que podremos desarrollar una paz y tranquilidad total, porque eso significa instalar en nuestro corazón el amor, ese que une y libera', sostuvo.
