Tras la declaratoria de calamidad pública en el Atlántico por cuenta de los efectos de ‘El Niño’, la administración departamental priorizó varias acciones en el territorio para contrarrestar los estragos de este fenómeno de variación climática y evitar una emergencia sanitaria.
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El gobernador Eduardo Verano resaltó las acciones que hasta ahora se han adoptado en el departamento y la importancia de poner en el centro de atención a las comunidades.
'Para nosotros siempre será clave atender las necesidades de las poblaciones, por eso, desde que asumimos el mandato que nos dieron, hemos estado al frente de cada una de las acciones que garanticen su bienestar', destacó el mandatario.
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Por su parte, Lady Ospina, secretaria de Agua Potable y Saneamiento Básico del Atlántico, indicó que la declaratoria de calamidad pública permitirá actuar 'más rápido y de manera más eficiente' ante las situaciones que se registren en el territorio por la temporada seca.
Indicó que este momento la prioridad es atender las situaciones más críticas que presenta el departamento, resultado de los bajos niveles del río Magdalena y el Canal de Dique, en los sectores de suministro de agua potable y los distritos de riego que atiende las actividades agrícolas en el departamento.
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Para el primero, señaló, se están monitoreando las 14 botocatomas de manera permanente y en especial los puntos críticos reportados hasta ahora que son los ubicados sobre el Dique.
'Las operadoras han trasladado las cinco bocatomas ubicadas sobre este canal hacia el centro del mismo con el objetivo de lograr el calado de abastecimiento. Si el nivel sigue bajando de manera acelerada, como ha venido pasando, se debe tomar otra medida como un abastecimiento a través de carrotanques', explicó Ospina a EL HERALDO.
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En ese mismo sentido, la funcionaria indicó que si estas medidas resultan insuficientes se procederá, como está estipulado en el plan de acción, a una intervención más profunda como las actividades de dragado o una bomba estacionaria sobre el canal de manera portátil.
Además indicó que se tomaron acciones en Campo de la Cruz, punto más crítico por los bajos niveles del río Magdalena.
'Ya se tiene un canal que es el que ha permitido el abastecimiento; se está abriendo otro canal para tener suplencia en caso de que el nivel del río baje mucho y no se dé ingreso por parte de ese brazo del río. Adicionalmente en el plan de acción se estableció la posibilidad de trasladar la bocatoma sobre el río de manera portátil', anotó.
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Sobre el caso del corregimiento de Puerto Giraldo, en Ponedera, indicó que se hizo el traslado de la bocatoma para garantizar el abastecimiento y se tiene previsto –si el nivel sigue bajando– implementar un dragado.
En Puerto Colombia, con la cuña marina, sostuvo que la empresa Triple A activó el plan de acción correspondiente a atender parte del déficit de agua en este municipio desde Barranquilla, combinar el agua y poder garantizar el abastecimiento.
'En caso de que el río baje de manera acelerada y esta cuña sigua afectando, deberá activarse el plan de atender la comunidad de manera sectorizada con agua desde el Acueducto Regional de Barranquilla y complementando el servicio con agua en carrotanques', apuntó.
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En el tema agrícola, que es el otro punto más crítico de la emergencia, la funcionaria precisó que se están implementando tres acciones. La primera es la habilitación en San Pedrito de la dársena o el ingreso de la bocatoma al distrito de riego de Suan y Santa Lucía, que corresponden a garantizar el calado en ese punto del río para que pueda ingresar el agua y abastecer las actividades que dependen del distrito.
De la misma manera, y previendo los bajos niveles que pueda llegarse a presentar en el embalse El Guájaro, señaló que se realizarán actividades de dragado y trasvase en el punto de captación del distrito de Riego de Repelón –que se abastece de este cuerpo de agua– y la habilitación de compuertas para el sistema de drenaje en Manatí.