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El choque entre las condiciones secas que han prevalecido durante los últimos días con el paso de una onda tropical por el mar Caribe fue la causa, de acuerdo con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), de los fuertes vientos que se registraron este lunes en el departamento y generó un sinnúmero de afectaciones.

De acuerdo con la entidad, por el mar Caribe están transitando –actualmente– dos ondas tropicales, lo que incrementa la posibilidad de que se forme un ciclón: “Lo que sucede es que suelen formarse muchas nubes y humedad, pero como en las horas del día hubo condiciones muy secas y bastante radiación solar se generó como un choque y aumentaron significativamente los vientos. Cuando pasa esto se puede combinar una ráfaga de vientos con tormentas eléctricas y se observan condiciones como las de ayer (lunes)”.

Ghisliane Echeverry, directora general del Ideam, se refirió a otros factores que pueden alterar el comportamiento atmosférico del territorio.

“De manera general estamos afrontando un cambio climático que nos genera temperaturas récord en varios sectores, pero también el paso de la oscilación Maiden Julian y la zona de confluencia intertropical que se basa en la formación de un gran grupo de nubes, sobretodo en el Caribe y la región Andina”, dijo.

Asimismo, Echeverry mencionó que “el Caribe y el océano Atlántico atraviesan por una temporada de ciclones tropicales, por lo que no se descarta la formación de precipitaciones y vendavales durante todo el mes de septiembre hasta noviembre del presente año”.

Sin embargo, el Ideam fue enfático en que las ondas que afectaron al departamento ya perdieron su fuerza.

“La onda que afectó al Atlántico fue la número 38, pero no nos podemos enfocar solamente en ondas tropicales de manera específica como la culpable de los vendavales, ya que estamos en una temporada de ciclones y a veces unos fenómenos se dan más que otros, lo que sí es claro es que ya perdió toda su configuración la onda y da paso a otra. Hay que tener en cuenta que estas ondas no solo generan vendavales, sino que también se puede generar un oleaje entre 1.5 y 3 metros, así que las emergencias se puedan presentar en mar adentro”, comentó

Por otro lado, el Ideam indicó que la ciudadanía debe estar atenta a los cambios en la temperatura para prever la llegada de vendavales a sus territorios.

“Es común que se presenten lluvias de carácter moderado, pero sí podemos señalar algún indicio de vendaval es el tránsito de alguna onda por el territorio en este momento y haya elevadas temperaturas en una jornada de mañana que cambien rápidamente hacia la tarde con unos vientos muy volados y mucha humedad. Cabe recordar que durante el día lunes se registraron ráfagas de viento entre unos 18 y 20 km/h pero luego aumentaron hasta tener una velocidad de 70 km/h”, señaló.

¿Qué se viene?

Nelson Rangel, geólogo y docente Universidad del Atlántico, precisó las causas que conllevan a que los vendavales golpeen con fuerza a Barranquilla y los municipios.

“Hay sectores que por su proximidad con el mar, la vegetación, cobertura vegetal y topografía pueden sufrir más los efectos de los vendavales, pero hay factores como la infraestructura que también maximizan el impacto; por eso, las autoridades deben identificar las vulnerabilidades que tienen sus territorios para adoptar medidas”, dijo.

A su vez, expresó que los efectos del vendaval generan una serie de consecuencias en los ecosistemas marítimos: “La temporada ciclónica puede tener un impacto significativo en el mar Caribe por los distintos efectos físicos que alteran temporal o permanentemente el equilibrio de los ecosistemas como pueden ser las corrientes fuertes, mezcla de agua, alteraciones en salinidad y temperatura del agua”.

Otros efectos negativos que los vendavales pueden causar en el departamento son “las afectaciones al ecosistema biológico con el desplazamiento y muerte de especies, sumado al cambio en los nutrientes y floraciones de algas”.

Recomendaciones

La Oficina de Gestión del Riesgo del Distrito de Barranquilla destacó la importancia de tener conciencia para evitar emergencias ante los fenómenos climáticos. “Se hace un llamado a no arrojar basura ni otros elementos en la calle, ya que pueden obstruir el drenaje; abstenerse de subir a lugares altos y expuestos al viento sin las adecuadas medidas de protección; no tocar postes o cables eléctricos durante la lluvia”.

Asimismo, José Estrada Charris, coordinador de Gestión del Riesgo de la Cruz Roja Seccional Atlántico, extendió un llamado a los habitantes y visitantes de las zonas costeras para “evitar actividades marítimas como la pesca y el turismo náutico, ya que el oleaje puede alcanzar alturas que pongan en riesgo la vida”.

Agregó, además, que “la ciudadanía debe tener a la mano kit de emergencia con agua potable, alimentos, linternas, baterías y botiquín de primeros auxilios; y garantice la protección de su vivienda reforzando ventanas, puertas, y retirando los objetos sueltos en el techo o zonas que puedan ser arrastrados”.