El senador Mauricio Gómez Amín calificó como “lamentable” la decisión del Gobierno nacional de declarar un racionamiento programado de gas natural en la región Caribe. Indicó que esta medida evidencia la falta de planeación ante contingencias.
“Si bien entendemos que esta medida tiene como objetivo garantizar el suministro a las plantas térmicas que dependen del gas para generar electricidad, la situación pone en evidencia un desafío estructural que no puede seguir repitiéndose”, dijo.
Sostuvo que este racionamiento de gas natural no solo afecta directamente la estabilidad del sistema energético, sino además la calidad de vida de los ciudadanos y la competitividad de la región Caribe y del país.
“El país está retrocediendo, después de 45 años Colombia perdió su autosuficiencia en gas natural. Desde hace meses he venido advirtiendo no sólo sobre esto, sino también sobre el impacto en el aumento de la factura, que podría elevarse hasta un 28%, producto de la reducción de las reservas de gas en el país. Según Naturgas, para 2025 el faltante de gas sería del 12% de la demanda y para 2026 este crecería hasta un 30%”, argumentó.
Gómez precisó que la situación es de gravedad. Manifestó que las proyecciones de impacto económico son “alarmantes”, con costos diarios que podrían oscilar entre $80.000 y $170.000 millones para el sector eléctrico, y entre $5.000 y $13.200 millones para el gas natural.
Expuso que esta situación no solo crea incertidumbre para los usuarios residenciales y comerciales, sino que también “afecta gravemente” a sectores productivos esenciales.
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“Es inaceptable que en pleno siglo XXI tengamos que recurrir a racionamientos programados. Esta medida es una consecuencia de la falta de previsión en la planeación energética del país. Urge que el Gobierno implemente soluciones estructurales que permitan garantizar un suministro confiable y continuo de energía, tanto eléctrica como de gas, a lo largo y ancho del territorio colombiano”, subrayó.
Por último, el congresista hizo un llamado al Gobierno nacional para que no solo gestione la crisis actual, sino que actúe de manera “proactiva” en la búsqueda de fuentes alternativas de energía.
“Se debe fortalecer la infraestructura energética, y fomentar la inversión en energías renovables. El país no puede permitirse seguir dependiendo exclusivamente de fuentes que, ante eventos climáticos o técnicos, puedan colapsar y llevarnos a situaciones como la que hoy estamos enfrentando”, puntualizó.
