Con 18 votos a favor y 2 en contra, el Concejo de Barranquilla aprobó los ajustes a las tarifas del impuesto de industria y comercio que propuso el Distrito en el marco de un proyecto para modificar el Estatuto Tributario
Durante la sesión, los miembros del cabildo distrital –de manera unánime– dieron respaldo a la adopción de una serie de beneficios para los contribuyentes puedan ponerse al día con las obligaciones tributarias, así como exención en los derechos de tránsito para los vehículos de la Policía y los Bomberos.
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Samir Radi, presidente del cabildo distrital, sostuvo que las modificaciones al Estatuto Tributario se han venido estudiando desde hace varios meses, teniendo en cuenta que es necesario que los ingresos del Distrito se incrementen.
“La base de contribuyentes que toca con un incremento sustancial es del 6 %, al otro 94 % solo sube un porcentaje mínimo o no se toca; hay sectores que siguen iguales a como venían en el Estatuto Tributario”, explicó el concejal de Cambio Radical.
Destacó que el mencionado proyecto también permite que se “siga favoreciendo la inversión en la ciudad, que haya mayor independencia tributaria”.
El concejal Juan José Vergara resaltó el trabajo que ha venido adelantado el Concejo para respaldar las iniciativas que permitan dinamizar el desarrollo de la ciudad.
“Hemos respaldado por un plan de Gobierno que ha demostrado que las cosas se hacen bien y los recursos son bien invertidos. En vista de que no hay dinero, incluso a nivel nacional, se hace necesario que se adopten medidas en este sentido”, dijo.
Expuso, además, que “hasta el Gobierno nacional tiene problemas que pueden ser impopulares. Por ejemplo, la valorización que se cobrará desde la calle 84 para arriba. Es seguro que los contribuyentes lo paguen, porque se requiere el desarrollo”.
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A su turno, el concejal Juan Camilo Fuentes, uno de los ponentes de la iniciativa, aseguró que son algunos sectores los impactados con la medida, que aportarán recursos frescos para cumplir con las metas del Plan de Desarrollo.
“Barranquilla necesita de este esfuerzo adicional por parte de algunos sectores económicos. El Plan de Desarrollo incluye proyectos que significan desarrollo para la ciudad. Sin duda, estos recursos van a permitir que la economía crezca, que haya inversión pública y esperamos que se genere de calidad para la ciudadanía”, agregó.
Por su parte, el concejal Frank Chapman, que fue uno de los concejales que no dio aval a las modificaciones del impuesto de industria y comercio, indicó que su decisión se encuentra sustentada en evitar impactos negativos para el sector productivo en medio de un panorama “complejo”.
“Barranquilla es amiga de los empresarios, de los trabajadores. Los empresarios son los principales socios de la ciudad, de donde se logra el mayor recaudo. No podemos seguir golpeando a los empresarios y al sector productivo de la ciudad”, dijo.
Fue enfático al sostener que “en la ciudad, de acuerdo con Anif, 7 de cada 10 empleos son informales. En el Distrito, los profesionales ganan un promedio del 54 % menos que en otras ciudades. Por eso mi voto es negativo, porque si quiero que Barranquilla crezca, pero el sector público debe entender que los empresarios no se pueden asfixiar porque se van”.
A su turno, el concejal Andrés Ballesteros expuso que “este proyecto impacta a la ciudad de manera positiva. Con el dinamismo que tiene la economía era importante hacer estas actualizaciones del ICA, teniendo en cuenta el nivel de ejecución que tiene la administración”.
Algunas de las modificaciones
La tarifa de actividades para instituciones financieras como establecimientos bancarios y compañías de seguro se mantendrá en “30 por mil”, en el sentido de que “el Distrito ha reportado importantes utilidades a dicha industria”.
Se ha planteado, además, una tarifa diferencial para las actividades financieras realizadas por los fondos de empleados y cooperativas, correspondiente al 12.5 por mil.
Con relación al sector de la producción de cervezas y demás bebidas alcohólicas. En ese sentido, el Distrito ha planteado un incremento del 11 al 30 por mil como una “medida de aporte a las inversiones y de responsabilidad social, dado que aspectos logísticos, de tránsito, seguridad y demás se deben atender con mayor prelación con la realización de los diferentes eventos masivos”.
