Desde hace varios meses, los estudiantes y profesores de la Universidad del Atlántico esperan con ansias la entrega de las obras de recuperación arquitectónica del edificio de Bellas Artes, en el corazón del barrio El Prado de Barranquilla.
Parecía que la luz al final del túnel por fin se iba a ver el pasado 7 de diciembre. Pero, una vez más, las ilusiones se apagaron como las velas en la madrugada de ese mismo día cuando se dio por claro que el contratista no iba a cumplir con la meta.
Lo más grave es que esta era la segunda fecha de entrega del proyecto, luego de un aplazamiento pedido por el mismo contratista que tenía como fecha original de entrega el 26 de noviembre. Luego de este incumplimiento, las directivas de la universidad decidieron actuar.
“Como bien se sabía la fecha de entrega estaba pactada para el 7 de diciembre. Ellos no cumplieron, y debido a ese incumplimiento, la Universidad con ocasión de todos los plazos que se han dado, y los otrosíes que se han hecho al contrato, finalmente decidió iniciar un proceso administrativo sancionatorio contra el contratista”, explicó una fuente de la Universidad del Atlántico que fue consultada por EL HERALDO.
La determinación de pasar directamente a los estrados administrativos para las sanciones se tomó hace una semana, pero ya el equipo jurídico de la Uniatlántico avanza para imponer las multas a las que haya ocasión.
“Ese proceso se inició el 9 de diciembre, es decir, en vista de todo el incumplimiento, la Universidad evaluó todo lo que estaba sucediendo y le comunicó al contratista de que definitivamente se iba a iniciar este proceso, que más o menos podría demorarse un mes, y en el cual se terminará por decirle cuales son las multas que deberá pagarle a la Universidad por haber incumplido las fechas que se habían pactado para la entrega final de la obra”, indicaron desde la alma mater.
Las obras siguen
Pese a que la sanción se conocerá durante las próximas semanas, lo cierto es que el proceso de intervención a la sede no se detiene por pedido del mismo contratista.
“El contratista pidió en este lapso, mientras se llama a la audiencia y se surte el proceso administrativo, que les permitiéramos seguir en la obra trabajando, para poder adelantar la obra. Sin embargo, ya quedó por escrito hasta donde llegó la obra a corte del 7 de diciembre”, agregó la mencionada fuente.
La solicitud del contratista fue aceptada por parte de las directivas del principal centro de educación superior del departamento, buscando respaldar los intereses de los estudiantes.
“Por el beneficio de la obra, la Universidad aceptó que ellos siguieran trabajando, porque tienen que terminar, aunque se les vaya a sancionar y existan las multas y todo esto, lo que a la Universidad del Atlántico finalmente lo que le interesa es que la obra se termine lo más pronto posible”, comentaron de la Uniatlántico.
Esto, especialmente porque las obras están a un tiro de ser terminadas: “En este momento el avance global de la obra es del 86.49%”.
En ese sentido, los argumentos presentados para explicar la demora no han sido satisfactorios para las directivas universitarias, que ahora tienen la esperanza de que el trabajo quede listo para finalizar el año.
“Ellos pidieron unos temas extemporáneos, por unos asuntos de materiales, luego además la temporada de lluvia los afectó y los retrasó en cuestiones de obras. La entrega, antes, estaba pactada para noviembre y ellos solicitaron antes de esa fecha por escrito un plazo extemporáneo que llegaba hasta el 7 de diciembre, pero se retrasó el tema y no pudieron definitivamente cumplir con ese 13.51%. Es muy probable que en este mes, mientras se surte el tema del proceso administrativo sancionatorio, ellos alcance a terminar”, puntualizó.
Mientras, la comunidad universitaria tendrá que pasar la Navidad a la expectativa que la finalización de ese pequeño porcentaje de las obras sea el regalo definitivo para empezar el 2025 con una sede recuperada.
Contratista explicó que les hizo “falta tiempo”
William Yacamán, representante legal de la empresa contratista, explicó a EL HERALDO, los motivos detrás del retraso de la obra.
“Este es un proyecto de restauración y en el camino va teniendo dificultades. Ha habido cambios en los diseños que han traído adiciones de tiempo que no han sido suficientes. Hemos pedido unas adiciones y el tiempo que nos han dado no ha sido suficiente. Nunca hemos dejado de trabajar en el proyecto”, enfatizó Yacamán.
Sobre la fecha de finalización, hizo claridad que en sus cuentas ya están en el 94 % y que en enero concluirán con lo que falta.
“Nosotros pedimos hasta enero 30 en una carta reciente. Para nosotros falta el 6 % , de un proyecto de más de 40 mil millones ¿Amerita que nos multen a hora? Hemos hecho un proyecto con unos acabados impresionante, hemos tratado que el proyecto sea de calidad y eso necesita un tiempo”, puntualizó.