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Las prórrogas que han sostenido al peaje Papiros estarían a punto de acabar, de acuerdo con información de la Gobernación del Atlántico y la ANI. Desde el 2023 se vienen realizando distintas mesas de trabajo para su desmonte, reuniones en las que solo han logrado suspender el cobro a categorías 1 y 2 por cierto periodo de tiempo.

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Autoridades, expertos y habitantes concuerdan con que este peaje es antitécnico, obstaculiza el comercio en el municipio y genera largas filas para que carros particulares, generalmente de Puerto Colombia, paguen una o dos veces para ingresar y salir de su territorio.

El mayor logro de este año fue que la Gobernación tomó la temeraria decisión de asumir el mantenimiento y la operación de los 14 kilómetros de la Vía al Mar, en donde está ubicada la caseta. Ante esto, se han realizado una serie de comités para evaluar si el gobierno departamental podrá encargarse.

Con base en la información suministrada por la ANI, la agencia se ha encargado de presentarle a la Gobernación cuánto cuesta sostener el corredor durante las mesas. A raíz de esto, la Gobernación del Atlántico le pidió una prórroga de 180 días para evaluar el tema, ya que para mantenerlo y operarlo requiere de grandes sumas de dinero.

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Al respecto, el Secretario de Interior de la Gobernación, José Antonio Luque, le aseguró a esta casa editorial que las mesas han avanzado y está definida su posición de asumir el tramo. Asimismo, anunciaron que “la ANI viene trabajando con el concesionario la desafectación de los 14 kilómetros”.

El propósito de ambas partes es que para febrero del otro año esté solucionada la desafectación. Es decir, hasta el momento solo queda que el concesionario, Ruta costera, “se ponga de acuerdo con sus bancos y financiadores para poder desafectar dicho tramo”, indicó. Y agregó que una vez concretado este trámite, esperan desmontar definitivamente el peaje.

El anuncio de la reactivación

Como un cuento infantil, la historia del Peaje Papiros este año tiene un inicio, nudo y “desenlace”. Todo comenzó cuando, a principios del 2024, el entonces Mintransporte, William Camargo, realizó declaraciones acerca de la reactivación del cobro a las categorías 1 y 2 de vehículos en el peaje Papiros. Lo anterior con el argumento de que era crucial una fuente de cobro para asumir los costos de operación de este modelo de concesión y las obras que requería.

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Y en julio, mes en el que el presidente Gustavo Petro sacó a Camargo de su gabinete, sale una resolución del Ministerio anunciando que habrá una tarifa diferencial de 1.500 pesos para los vehículos 1 y 2 en el peaje. Esta medida entraría en vigencia el 1 de agosto y se estableció a través de la resolución 20243040030055 .

La tarifa solo aplicaba para los vehículos particulares residentes de Puerto Colombia, usuarios de servicios de los colegios localizados en el sector ‘Y de los Chinos’ y la caseta de control, así como para los prestadores del servicio de transporte público de pasajeros de Puerto Colombia a Barranquilla y alrededores.

De esta forma, desde el 1 de julio se abrieron las inscripciones voluntarias para acceder a las tarifas.

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La medida generó descontento en los habitantes y autoridades del municipio. El alcalde de Puerto Colombia, Plinio Cedeño, manifestó que estaban en desacuerdo con la tarifa. Y aseguró que luego de estudiar detalladamente la parte resolutiva, hallaron que en el fondo se planteaba una estrategia de cobro en la que queda abierta la posibilidad de que por medio de la ANI se incrementen las tarifas diferenciales en cualquier momento.

En el ojo del huracán

Cuando llegó la fecha en la que se vencía la prórroga, la ministra María Constanza, el gobernador Eduardo Verano y el alcalde Plinio Cedeño solicitaron ampliar por 30 días la suspensión del cobro de las categorías de vehículos 1 y 2.

Lo anterior, según el gobernador Verano, para acordar las medidas necesarias con relación a esta caseta de peajes.

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Sin embargo, llegó el primero de septiembre y ya se había generado una tensión en los habitantes de Puerto Colombia. Incluso se llegó a pensar que los más de 800 usuarios inscritos a las tarifas diferenciales indicaban algún tipo de claudicación, pero la indignación en los residentes seguía a flor de piel.

“Esto va a ser un perjuicio para la economía de nuestro municipio, porque nosotros estamos inaugurando unos restaurantes donde algunos inversionistas han inyectado una gran cantidad de dinero”, explicó entonces William Álvarez, miembro del Comité No Al Peaje Papiros.

Por esta razón, los participantes del comité y líderes sociales realizaron una protesta pacífica en las instalaciones de la caseta en rechazo de la reanudación del cobro. Y el 3 de septiembre levantaron las talanqueras para dar paso a la larga fila de vehículos que permaneció por más de una hora en el sitio. Ese mismo día, convocaron una protesta indefinida.

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Para mitades de mes, los lineamientos de la ANI acordaron el cobro para las categorías 1 y 2 en el peaje. En aquella ocasión, la resolución de Mintransporte estipulaba que el cobro solo se suspendería en horas pico.

Por ende, esa misma mañana, llegaron uniformados de la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Udmo), para bajar las talanqueras las cuales habían permanecido arriba desde hace semanas. Acto seguido, los habitantes procedieron a ubicarse frente a la caseta con el fin de evitar que los vehículos pasaran y pagaran.

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Los uniformados, al ver que estaban imposibilitando el cumplimiento de la ley, procedieron a retirarlos y se generó un enfrentamiento entre estos. Como resultado, se llevaron a varios de los que se resistían a retirarse por su voluntad.

Verano tomó las riendas

A principios de septiembre el mandatario sacó su propuesta más ambiciosa a la ANI: que la gobernación asuma el mantenimiento y la operación del tramo de 14 kilómetros de la Vía al Mar entre Puerto Colombia y Barranquilla.

“Para nosotros los 14 kilómetros adicionales lo podemos tener en buen estado ya que tenemos toda la experiencia y el conocimiento para hacerlo, así como el equipo humano que lo puede hacer”, manifestó el mandatario.

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Finalmente, el pasado 14 de noviembre, tras hacerse viral los interminables trancones que se generaban en el peaje, el Ministerio de Transporte emitió la resolución que establece la suspensión de cobro de vehículos C1 y C2 en el peaje Papiros por seis meses. A los automotores 3 se les siguió cobrando con la tarifa diferencial.