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La instalación de un peaje a la altura del corregimiento de Arroyo de Piedra, en jurisdicción del municipio de Luruaco, se puso en marcha a pesar del rechazo por parte de la comunidad.

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La concesión Autopistas del Caribe dio inicio a las obras de preparación y adecuación del terreno donde se habilitará la caseta, que hace parte esencial del equilibrio financiero de este proyecto que busca conectar en doble calzada a Cartagena y Barranquilla por la Cordialidad.

Los miembros del Comité No Al Peaje en esta zona del departamento no ocultaron su descontento por estas labores. Indicaron, además, que la tala de árboles –que se ejecutan entre Arroyo de Piedra y Molineros– no contaría con el permiso de las autoridades competentes.

Cortesía Autopistas del Caribe

“Hemos visto que hay empleados de la concesión en el kilómetro 62, en donde se piensa construir el peaje. Están de manera ilegítima y arbitraria cortando árboles de guayacán, calabazo y matarratón. Árboles en los que habitan ciertas especies”, aseguró el líder Enildo Altamar.

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Por esa razón, la comunidad anunció que desde el próximo lunes se adelantará un paro indefinido en esta vía para rechazar esta “imposición”, teniendo en cuenta que en distintos escenarios han expresado su rechazo a la instalación de dicha caseta de peaje.

“Si siguen con sus labores, hay bloqueo hasta que se defina de manera legal y legítima la construcción del peaje, el cual es ilegal en estos momentos. Que se desvíen todos los vehículos, pero Arroyo de Piedra se va a bloquear y no será con llantas ni palos. Habrá volquetas, busetas y material en la mitad de la vía”, detalló Altamar.

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Otro habitante de la zona indicó que si bien la concesión cuenta con los permisos de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico (C. R. A), no contaría con el aval de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) para adelantar dicha intervención.

Cortesía Autopistas del Caribe

Mientras que el ciudadano Humberto Currea rechazó las labores de limpieza para construir la caseta: “No estamos de acuerdo con la forma en cómo la ANI con la concesión vienen ejerciendo las labores de limpieza y de reacomodo del lote. Muchos estamos amenazados, pero vamos a seguir con la lucha frontal en contra de este peaje que afecta los intereses colectivos y económicos de nuestra población jurisdiccional”.

Defensa de la concesión

Esta casa editorial se comunicó con la concesión Autopistas del Caribe, la cual indicó que las obras en esta zona no requieren de licencia ambiental puesto que se “se desarrollan sobre una infraestructura existente; en este sentido, el instrumento de manejo y control ambiental es el Paga de operación y mantenimiento del corredor vial existente”.

A su vez, la entidad afirmó que dicha actividad cuenta con el permiso de aprovechamiento forestal único, otorgado mediante la Resolución No. 0001016 de 2023 de la Corporación Autónoma Regional del Atlántico, que fue expedido el 4 de diciembre de 2023.

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“Por ende, esta autorización le permite a Autopistas del Caribe S.A.S. adelantar las actividades necesarias para el proyecto de construcción de una estación de peaje en el PR 62+50, jurisdicción del municipio de Sabanalarga, Atlántico”, agregó.

Reiteró que las actividades se desarrollan en cumplimiento de la normativa ambiental y con el acompañamiento de las entidades competentes.

Por otro lado, Autopistas del Caribe indicó que los días 9 y 10 de diciembre de 2024 se llevó a cabo cuatro reuniones con las autoridades locales y la comunidad para socializar el alcance de las actividades y resolver inquietudes sobre el proceso.

También indicaron que las actividades de preconstrucción abarcan el ahuyentamiento de fauna y aprovechamiento forestal y se iniciaron desde el pasado 27 de diciembre.

Pronunciamiento de la Anla

La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) le aseguró a EL HERALDO que la concesionaria no necesita el permiso de la entidad debido a que esta zona no les pertenece.

“El proyecto le pertenece a la Corporación Autónoma Regional. En el Anla no hay expediente de esa propuesta”, puntualizó.