Un balance positivo en materia de agua potable, saneamiento básico e infraestructura ha presentado la Gobernación del Atlántico frente a la vigencia 2024, en la cual se han adelantado inversiones por cerca de $1.4 billones.
De acuerdo con el gobernador Eduardo Verano, lo más relevante de este proceso es que los ciudadanos ahora tienen mayor calidad de vida por el desarrollo de proyectos clave en agua potable, saneamiento básico, infraestructura y vías.
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“Vamos muy bien con los acueductos regionales del Norte y el Rural de Sabanalarga; Palmar de Varela llega al 100 % de cobertura en alcantarillado con la estación de bombeo Cuenca 2 que está arrancando y eso es maravilloso. Eso lo complementamos con un billón de pesos que ejecutaremos en mejorar y construir vías nuevas con el Plan Vial Departamental. Estamos muy contentos con cerrar esta primera etapa y poder mostrar avances como estos”, indicó el mandatario departamental.
Los proyectos de agua
En obras de agua potable la Gobernación del Atlántico ejecuta una inversión de $271.000 millones en nueve proyectos en Malambo, Luruaco, Sabanalarga, Baranoa y Repelón. El Acueducto Rural de Sabanalarga presenta un avance del 68 % y beneficia a 18.136 habitantes de los corregimientos de Molinero y Colombia mientras que el Acueducto Regional del Norte se acerca al 50 % de construcción y optimizará el suministro de agua potable a un millón 650.000 habitantes de ocho municipios del norte y la zona costera del departamento.
En cuanto a saneamiento básico, la Planta de Tratamiento de Agua Residual (Ptar) de Santo Tomás, Sabanagrande y Palmar de Varela avanza en su construcción y beneficia a 107 mil habitantes, de igual forma se encuentra en periodo de pruebas iniciales la nueva estación de bombeo del alcantarillado de Cuenca 3 en Palmar de Varela y con esto el municipio alcanza el 100 % de cobertura; estas, junto a otras obras de saneamiento en Soledad, Campo de la Cruz, Santo Tomás, Santa Lucía, Baranoa y Sabanalarga suman una inversión de $136.000 millones.
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“2024 estuvo lleno de trabajo para cumplir con la prioridad del gobernador Eduardo Verano de poder conectar el 100 % de la población a agua potable y más agua es más salud, más vida. También es una gran apuesta en saneamiento por la sostenibilidad de nuestros cuerpos de agua y que la gente disfrute de sus calles, sus parques y sus municipios sin tener que saltar sobre aguas residuales”, aseguró la secretaria de Agua Potable, Lady Ospina.
Inversión en vías
La densidad de vías secundarias es un indicador que calcula la cantidad de kilómetros de carreteras secundarias en relación con la población de un departamento, en ese sentido, la red de carreteras que conecta a sus municipios con las carreteras nacionales hace del departamento del Atlántico el de mejor densidad de vías secundarias en Colombia.
En ese sentido, la administración departamental los primeros pasos en contratación de nuevas vías a doble calzada, el avance del plan de mantenimiento vial de la red secundaria departamental, ya en ejecución, y la apertura de los primeros tramos de la Gran Vía que conecta el nororiente del Atlántico con su zona costera y la Circunvalar Sur de Baranoa que une el centro y el suroccidente del departamento entre La Cordialidad y la vía hacia Usiacurí.
“Estamos ordenados para hacer todo el proceso de contratación, el primer año es el año de la organización, es el año de la concreción de diseños, apertura, cierre de licitaciones y contratación pero ya en nuestro segundo año entramos a materializar con la construcción de obras que esperamos terminar a nuestra salida en el año 2027″, indicó el gobernador Verano.
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El plan integral vial del Atlántico, con una inversión que asciende a un billón de pesos, incluye la construcción de 150 kilómetros de vías nuevas como las segundas calzadas del Corredor Vial Cordialidad-Caracolí–Malambo, la Vía Circunvalar-Juan Mina-Las Cayenas entre Barranquilla y Tubará y la prolongación calle Murillo-Sexta Entrada entre Soledad y Malambo.
Dentro de este plan integral, se está realizando el mantenimiento de 450 km de vías secundarias con inversión de $19.000 millones. Al inicio del 2025 han sido intervenidos 100 kilómetros en diez municipios entre los que sobresalen las vías Juan Mina-Tubará, Piojó-Baranoa, Baranoa-Usiacurí, Juan de Acosta-Baranoa, Piojó-Aguas Vivas-Usiacurí y la vía a Salgar que aportan mejor conectividad, seguridad, impulso al comercio, el turismo y desarrollo económico en beneficio de toda la población atlanticense.
El pasado 23 de diciembre, el gobernador Eduardo Verano abrió la unidad funcional 1 de la Gran Vía en el corredor universitario entre Barranquilla, Puerto Colombia y la zona costera del departamento: una vía de 1.2 km a doble calzada de tres carriles cada una con un puente peatonal, un paso a desnivel, urbanismos y ciclorutas que alcanzaron una inversión de $77.205 millones.
La Gran Vía, además de ser la autopista que pasa por 14 instituciones educativas es también una autopista de la información y los datos que viajan a través de 48.000 metros de redes lineales subterráneas de telecomunicaciones que ingresan por el mar en Puerto Colombia y conectan el país y Suramérica con el resto del mundo.
En sinergia con la apertura de nuevas vías, en Baranoa ya fue entregado el primer tramo de la Circunvalar Sur que conecta la carretera La Cordialidad con la vía hacia el municipio de Usiacurí y el suroccidente del Atlántico. En este proyecto se construyen 1,8 kilómetros de vía completamente nuevos con inversión de $8.000 millones para disfrute de 80.000 atlanticenses con la interconexión a zonas de emprendimiento y ecoturismo en el departamento.
“En línea con el plan de desarrollo ‘Atlántico para el Mundo’ este año avanzamos hacia la finalización de la unidad funcional 2 de la Gran Vía y en cuanto al mantenimiento de las vías secundarias se beneficia directamente a una población de un millón de habitantes”, amplió el secretario de Infraestructura del Atlántico, Azael Charris.
La atención de emergencias
La Secretaría de Infraestructura del Atlántico movilizó todos sus esfuerzos técnicos, administrativos y financieros para atender emergencias que se registraron principalmente como consecuencia de las intensas lluvias del reciente fenómeno de La Niña.
En este sentido, en mayo de 2024 se reconstruyó el atrio de la iglesia Santo Domingo de Guzmán del municipio de Usiacurí; en la vía hacia el corregimiento de Chorrera en Juan de Acosta se instalaron 70 metros cuadrados de muros de contención y se construyó un box culvert. En vías del municipio de Repelón se construyó un nuevo box culvert y estabilizó uno existente afectado por la socavación del terreno y también se construyeron muros de contención para evitar futuras socavaciones.
Adicionalmente en el municipio de Soledad se atendió la emergencia por el desplome de una parte del puente sobre la calle 30 sector Simón Bolívar y la recuperación de un tramo de canalización de arroyo para garantizar la estabilidad de la vía Salao-Platanal.
