La inconformidad por las altas tarifas de energía en la región Caribe sigue en ascenso pese a las diferentes acciones emprendidas por el gobierno nacional –a través de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) y el Ministerio de Minas y Energía– en busca de consolidar una solución definitiva.
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Aunque desde el Ejecutivo se han adelantado acciones en pos de dicho propósito, varios son los retos que siguen sin superarse. Entre los puntos pendientes –según expertos en temas energéticos, gremios del sec tor y usuarios de esta zona del país– se encuentran el pago de los subsidios de energía para los estratos 1, 2 y 3, la opción tarifaria, el incumplimiento de obligaciones por parte de Air-e y las deudas de los usuarios constitucionalmente protegidos.
En medio de dichos vaivenes, a finales del año anterior, el ministro Andrés Camacho anunció la expedición de una resolución para establecer topes a los precios de la energía en bolsa, acto cuyos efectos, según expertos, podrían ser contrarios a los objetivos que la resolución pretende. Según el funcionario, con el acto anunciado se daría una reducción de los costos del componente de generación en la facturación
Camacho explicó, en ese momento, que la medida se adoptó teniendo en cuenta las fluctuaciones registradas a lo largo del año. Expuso que, en el mes de octubre, el precio de escasez rondaba los $945 pesos por kilovatio/hora y con la implementación de la medida bajaría a cerca de $359 por kilovatio/hora
Aunque se indicó que la medida era de efecto inmediato, se convirtió en una opción para los generadores debido a que las Obligaciones de Energía en Firme (OEF) se “cumplen conforme a la asignación hasta los años 2027 – 2028″, de acuerdo con expertos consultados por EL HERALDO.
De esta manera, agregaron los expertos, se explica la razón por la cual esta medida no ha tenido impacto real en el componente de generación para los usuarios del país, en especial, del Caribe.
¿Por qué son altas las tarifas?
Norman Alarcón, coordinador de la Liga de Usuarios del Caribe, explicó a EL HERALDO que la región Caribe tiene las tarifas eléctricas más altas del país debido al régimen especial tarifario implementado tras la llegada de las empresas Air-e y Afinia.
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“A estas empresas se les otorgaron beneficios como el traslado a los usuarios de los costos de las pérdidas técnicas y no técnicas. Según los informes de tarifas de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, mientras que las pérdidas representan el 8% de la tarifa en el promedio nacional sin la Costa, este porcentaje aumenta entre 12 % y 16 % de la tarifa dependiendo del comercializador de esta región”, sostuvo
Otro factor que influye en las altas tarifas, de acuerdo con Alarcón, es la sobretasa de 20 % en la comercialización, que cobran solo en la Costa, y la opción tarifaria, que se sigue cobrando: “Actualmente está en $13 el kilovatio hora. Petro se comprometió a asumir ese pago y no lo ha hecho”
En esta misma línea, el ex ministro de Minas y Energía, Amylkar Acosta, señaló que de asumir la Nación la opción tarifaria, como lo prometió el presidente Petro, el valor de la factura bajaría cerca de un 20 %.
Indicó además que el jefe de Estado ha afirmado en varias oportunidades que las alzas en las tarifas obedecen a la especulación por parte de las empresas generadoras, “dando lugar a precios exorbitantes en la bolsa de energía. Sin embargo, hasta la fecha no se conoce una sola investigación por parte de la Superservicios y de la Superintendencia de Industria y Comercio”.
Otro de los factores que incide en los altos costos de la energía corresponde a la falta de inversiones para las redes eléctricas, así como las altas temperaturas que hay en la región y que exigen el consumo de más energía por el uso de los aires acondicionados y abanicos.
En la región Caribe, esto representa el 28% de la demanda de energía del país, según XM”, agregó.
Por otro lado, en el caso de Aire, luego de su intervención se ha expuesto al 50 % de compras de energía en la bolsa, un precio que es mucho más alto que con los contratos bilaterales con las empresas generadoras. Adicionalmente, esta regulación ha incentivado a dicha empresa a incumplir con sus obligaciones, lo que lleva a la acumulación de una deuda que ya bordea el billón de pesos y que puede transformarse en un billón adicional a la vuelta de unos pocos meses.
Las marchas de este jueves
Camilo Sánchez, presidente del Consejo Gremial Nacional, dijo que la movilización convocada en la ciudad no tiene sentido.
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“Decir que en Barranquilla, en pleno Carnaval, vamos a invitar a la gente a que salga a hacer una marcha sobre servicios públicos cuando el Gobierno tiene la plata, pero no la ha entregado, no tiene sentido. Necesitamos tomar decisiones técnicas y no jugar a la política en momentos donde necesitamos que no se apague el país”, dijo Sánchez.
El líder gremial reiteró que en la Costa el compromiso del presidente fue la opción tarifaria y no estaba ligada a ninguna reforma tributaria, e insiste en el desembolso de los recursos por los subsidios de los estratos 1, 2 y 3 y entregárselos a las empresas para evitar un “apagón financiero”, especialmente en la región Caribe.
Puntualizó que no se puede estigmatizar a los generadores como los malos ni tomar decisiones políticas.
Se necesita la entrada de más proyectos de generación al país
Las acciones que viene adelantando el Gobierno nacional a través de la Creg y el Ministerio de Energía, como implementar techos a los precios de energía en bolsa, es una medida que no va a beneficiar a los usuarios y, además, pone al país en riesgo de desabastecimiento de energía eléctrica, lo cual sería muy costoso para los colombianos. Así lo aseguró Natalia Gutiérrez Jaramillo, presidente de la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica (Acolgen).
Para Gutiérrez Jaramillo la coyuntura de precios es producto de la falta de energía porque los proyectos de generación no han entrado en operación cuando se esperaban. “En 2024 ingresó al sistema solo el 22% de la energía que debió entrar”.
Reiteró que los precios responden a la cantidad de energía disponible en el mercado y desde hace 5 años no ha ingresado la energía esperada. “Es importante que se den señales de política pública para incentivar el desarrollo de nuevos proyectos y que se haga un trabajo conjunto entre los sectores público y privado para que salgan adelante los proyectos que se encuentran en construcción”, sostuvo.
Resaltó que Colombia tiene un diseño de mercado que se ha construido sobre estudios y análisis técnicos y robustos, lo que significa que cualquier cambio debe tener una revisión de impactos de corto y mediano plazo para todos los colombianos.
