Un taxi fue arrastrado por un arroyo en la Vía 40, a la altura de la calle 72, durante un intenso aguacero que se registró este mediodía en la ciudad de Barranquilla. Las fuertes precipitaciones, que afectaron a diversos sectores de la ciudad, provocaron el desbordamiento de varios arroyos, lo que ha generado diversas emergencias a lo largo del día.
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El vehículo fue arrastrado por la fuerza de las aguas por varios metros, hasta que un grupo de personas que se encontraban cerca del lugar lograron auxiliar tanto al conductor como al automóvil. Sin embargo, al cierre de esta edición no se ha confirmado el estado de salud del conductor.
El aguacero, que ha estado acompañado de actividad eléctrica, ha afectado zonas como la calle 80 con carrera 70 y la carrera 50 con calle 85. Además, se reportan represamientos de agua debido a la acumulación de basura en diferentes sectores de la ciudad. En áreas cercanas a la Vía 40 y el Malecón, también se observan caudales de agua que han complicado la circulación vehicular.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) había advertido previamente sobre la posibilidad de lluvias intensas en Barranquilla y el Atlántico debido al paso de una zona de confluencia intertropical activa, que se espera continúe afectando la región durante el resto de la semana.
Incidentes previos
Este incidente se suma a otros eventos similares que han ocurrido en la ciudad recientemente. De hecho, el día de ayer, domingo, se vivió una jornada de emergencia por lluvias que ocasionaron la crecida de varios arroyos.
Uno de los incidentes más impactantes ocurrió en la calle 85 con carrera 49C, donde un automóvil particular fue arrastrado por el arroyo mientras su conductor, Roger Roa, permanecía dentro del vehículo. Roa relató que intentó cruzar el arroyo creyendo que el nivel del agua era bajo, pero la fuerza de la corriente lo arrastró por cinco cuadras. Su vehículo solo se detuvo al chocar contra un muro, lo que permitió que los ciudadanos lo auxiliaran.
Roa reconoció que fue una imprudencia intentar cruzar el arroyo, un riesgo conocido en la ciudad, pero que decidió hacerlo al ver a otros vehículos pasar. “Mi carro se apagó inmediatamente y el agua me arrastró hacia un bordillo, donde quedé atrapado por un rato”, explicó el conductor.
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En el mismo sector, un bus de la empresa Sobusa quedó varado cuando la corriente del arroyo apagó su motor. Aunque el bus no llevaba pasajeros, el conductor tuvo que ser rescatado por el cuerpo de bomberos, quienes acudieron al lugar para retirar el vehículo.
Este tipo de incidentes ha sido recurrente en la ciudad. Hace menos de dos semanas, un aguacero similar provocó que otro vehículo fuera arrastrado en la misma calle 85, lo que obligó la intervención de los Bomberos de Barranquilla para rescatar a los ocupantes.
