La representante de ONU Mujeres Colombia, Bibiana Aído, se refirió durante su visita a Barranquilla hace unos días, a las estrategias que hay que implementar desde las instituciones judiciales para reducir la violencia y el acoso contra la mujer en el ámbito laboral.
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En primer lugar, indicó que hay que garantizar el debido proceso para las víctimas de este tipo de violencia en sus lugares de trabajo.
“El 41% de las mujeres prefiere manejar este tipo de situaciones desde el ámbito privado, desde una conversación con ellas mismas, ya que tienen miedo de la retaliación que puedan tener por parte de su agresor o incluso por parte de la empresa y su condición laboral, entonces es clave que en los procesos judiciales se pueda avanzar para que generar confianza en las víctimas y las denuncias”, explicó.
Agregó, además, que en la ciudad de Barranquilla el 90% de las personas considera que la violencia contra las mujeres es un tema privado.
“En una encuesta que se desarrolla cada año con mujeres sobre la tolerancia social a la violencia, el 90% considera que es un tema privado que debe tratarse entre la pareja y familia, yo creo que eso es lo que hay modificar porque esto es un asunto público, hay que ver esto como algo de urgencia y cambiar esos patrones culturales que legitiman la desigualdad, la raíz de esta violencia de género”, explicó.
Aído fue enfática en que se deben implementar estrategias de prevención y acompañamiento para moderar este tipo de violencias. “Tiene que haber un enfoque inicial y preventivo para proporcionar capacitación regular tanto a los empleadores como empleadoras en temas de sensibilización, que se brinde una correcta atención psicosocial a las víctimas que trascienda incluso a sus entornos cercanos”.
Por otro lado, la exministra de Igualdad de España sostuvo que la violencia de género es un tema que le compete también al sector privado.
“Hay que implicar a los hombres, a las organizaciones, y los empleadores en la responsabilidad directa en que se cumplan los derechos del trabajo, entre esos la salud y seguridad; el bienestar y el respeto, que contribuyen a que el trabajo se realice en condiciones de no violencia y paz”, cerró.
