En riesgo se encuentra la salud de muchos docentes en Barranquilla, quienes tras comenzar la transición hacia el nuevo modelo de salud del magisterio hace unas semanas, han denunciado que los trámites para la entrega de medicamentos son lentos y que la prestación del servicio sigue siendo “ineficiente”.
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Carlos Luna, recién afiliado al magisterio, comentó que la operación está colapsada en la sede de Consalud, institución prestadora del servicio.
“Vine a consultar información sobre los trámites para reclamar mis medicamentos, pero después de tres horas fue que me atendieron, perdí toda la mañana en ese proceso y ahora me toca desplazarme a buscar mis medicinas”, dijo.
Expuso que también debe revisar que las órdenes cuenten con todos sus sellos “porque la entidad no se encarga de entregarlos, sólo de orientar a que uno los encuentre, pero entonces le piden a uno un montón de requerimientos. Yo tengo a mis hijos beneficiados con este servicio, si fuese por mí los sacaría porque no quiero que sufran lo mismo que yo, pero estoy en período de prueba todavía en el magisterio”.
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De igual manera, Erlinda Escorcia, pensionada del sistema educativo, mencionó que tuvo que comprar sus medicamentos por cuenta propia ante los problemas en los trámites con la nueva entidad.
“El problema que hay para la entrega de medicamentos es que se necesita de un sello por parte del doctor para que la dispensadora pueda realizar el proceso, pero entonces acá a uno no lo atienden para hacer eso; toca dar un montón de vueltas para que coloquen el sello, con la edad que tengo yo no tengo la energía para hacer todo estos trámites, así que tuve que comprar los medicamentos que necesitaba urgentemente para tratar la hipertensión”, dijo.
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Entretanto, Antonio Vidal, quién se encontraba reclamando medicamentos para su esposa, expuso que la nueva prestadora del servicio está incurriendo en las mismas fallas de la Clínica General del Norte.
“La atención era buena, solo que en el último tiempo no estaban entregando los medicamentos completos y las citas eran muy tardes, pero era todo directamente en sus instalaciones, ahora se supone que se cambió la entidad para buscar una mejora, pero realmente perdimos muchas ventajas que teníamos como los especialistas y el abasto que había para dispensar medicamentos”, relató.
Por su parte, Vera de Polo, docente retirada, contó que ha estado sin medicamentos durante todo el mes de mayo para tratar su condición de salud: “Todo está colapsado en las oficinas de Consalud y en las dispensadoras a las que nos orientan para ir a reclamar los medicamentos”.
