Los rezagos de la pandemia y la huelga que afectó la industria marcaron los resultados, y se puede decir que el horror corporal y el género musical han sido una especie de respuesta, reflejando también los extremos políticos globales.
El guión se desarrolla con una agudeza notable, evitando caer en sentimentalismos innecesarios. La puesta en escena tiene una clara influencia teatral, favoreciendo los diálogos intensos y las interacciones entre los personajes.
La película se centra en los últimos días de la vida de María Callas, la cantante de ópera más famosa del mundo. Larraín, que desde su infancia ha sentido una profunda fascinación por este género, muestra en María su vasto conocimiento sobre el tema.
Heretic nos deja reflexionando sobre los temas de la religión y la fe, al tiempo que nos enfrenta a lo aterrador que puede resultar creer ciegamente. La cinematografía de Chung-hoon Chung juega un papel crucial, enfatizando los claustrofóbicos espacios para transmitir el terror psicológico que sienten las misioneras dentro de la casa.
Mercedes, silenciosa y sumisa, representa un reflejo que contrasta con sus deseos más profundos, la oportunidad de experimentar una vida libre y autónoma, tomando las riendas de su propia existencia, aunque ello implique ir a prisión.
La dirección de la película resalta la crítica a las dinámicas misóginas y machistas que la mujer enfrenta a diario, mostrando la brutalidad de los ataques sin necesidad de ser muy explícita. La película es un contundente comentario sobre el control, la manipulación y el asalto a las mujeres por su género.
La película plantea preguntas profundas sobre el control de nuestro destino, el rol del cuerpo médico y el sacrificio por vivir unos años más.
La puesta en escena, la escenografía y la música contribuyen a que esta película atrape a la audiencia de principio a fin, invitándonos a reflexionar sobre temas siempre actuales como la justicia, la venganza, la traición, la piedad y la paciencia.
Su condición oculta y la discriminación de género que predominaba entonces pueden no justificar, pero sí explicar su conducta. En contraste, las acciones de Trump carecen de excusa.
La historia de Olfa se remonta a su infancia, a sus dos matrimonios, y a su lucha por la libertad. La película es un viaje íntimo al corazón de una familia rebosante de esperanza, rebeldía, violencia y solidaridad.