Luego de casi siete meses de estar cerrados, un total de 30 bares en Barranquilla reabren sus puertas al público en el marco del plan piloto y tras un estricto proceso de selección y evaluación.
Estos establecimientos fueron seleccionados tras la verificación de que contaban con los correspondientes protocolos de bioseguridad para evitar el contagio por Covid-19.
Ricardo Plata Sarabia, secretario de Desarrollo Económico del Distrito, expuso que 105 establecimientos se inscribieron en este proceso, que contó con acompañamiento y soporte académico de la Universidad Simón Bolívar.
'Determinamos que este jueves solo reabren los que evidenciaron un compromiso férreo en la implementación de los protocolos de bioseguridad y que recibieron una calificación mayor al 90%', expuso el funcionario.
Plata Sanabria también dijo que para entregar la autorización se tuvieron en cuenta los mecanismos para evitar aglomeraciones en áreas comunes como barras, taquilla, ropero y baños, entre otras.
Además, indicó que se revisaron las estrategias para garantizar el distanciamiento físico y la señalización con información de bioseguridad para clientes y colaboradores.
De igual manera, se evaluó la implementación de dispositivos digitales para el pago y los menús, los equipos de limpieza y desinfección del local y de las botellas, vasos y jarras, así como la habilitación de los puntos de control para la entrada y salida de los asistentes.
'Confiamos en que los barranquilleros repliquen ese mismo sentido de responsabilidad y solidaridad con este sector, uno de los más afectados por la crisis sanitaria, para que rápidamente pueda recuperar el dinamismo con el que venían antes de la pandemia', agregó.
Horarios
El Distrito informó que los establecimientos participantes en el piloto podrán funcionar todos los días hasta la 1:00 a.m., sin restricción de horario de apertura.
Se permite la asistencia de grupos de hasta máximo ocho personas por mesa. También se debe promover la gestión de reservas, a fin de mantener control sobre el aforo en los establecimientos.
Las autoridades distritales recalcaron que no está permitido el baile y dichos espacios deben utilizarse para la adecuación de mesas y sillas.
Por otro lado, no está permitido el uso de decoración, lanzamiento de papeletas, confeti, espumas u otros elementos que puedan convertirse en foco de contagio.
Además, se debe evitar la disposición de alimentos y productos en barras o en la modalidad de autoservicio, tanto para clientes como para empleados. Tampoco se permiten las prácticas de degustaciones.
Reacciones
Carlos de Moya, administrador de El Búnker, aseguró que se han tomado todas las prevenciones para que la experiencia de los clientes sea óptima.
'Tenemos unas expectativas altas. Los clientes deben reservar y el ingreso será cumpliendo con todas las medidas de bioseguridad que se encuentran vigentes', expuso De Moya.
Indicó, además, que el uso del tapabocas será obligatorio al interior del bar y que la venta de licor será de manera responsable.
Por su parte, César Ahumada, propietario de La Verbenera, expuso que estarán atendiendo público desde este viernes y que ya han recibido las primeras reservas de clientes: 'Tendremos seis personas trabajando en el local, dispuestas a atender a todos los amantes de la salsa'.