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El desplome por agotamiento de un caballo el pasado domingo a las 8:30 de la noche en el sector de El Laguito encendió de nuevo el debate entre el Distrito y los 68 cocheros de la ciudad.

Mientras el ente territorial dejó clara su posición frente a este tema a través del decreto 0656 que le plantea ciertas restricciones y medidas a los cocheros como horarios de trabajo; sitios de parqueo de los coches y condiciones físicas ideales para que los caballos tiren de estos; Joaquín Torres, abogado defensor de este gremio, aseguró que las noticias solo se han encargado de mostrar una sola cara de la moneda.

En torno a esta situación, explicó el abogado que con solo sanciones no se pueden tomar medidas cuando se olvidan las responsabilidades a las que la ley obliga al Distrito como el tener que subsidiar la actividad de los cocheros por ser declarados Patrimonios Históricos.

Para el abogado, la penosa realidad que viven hoy los cocheros de la ciudad aún no ha querido ser puesta en evidencia por parte del ente territorial y; por el contrario, quieren afectarlos con medidas y decretos que lo único que logran es incrementar la crisis que, según él, ellos afrontan.

Y mientras el debate se acentúa, la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria, Umata, atendía al caballo, confirmando así que el animal no aguantó el peso de la carga y que estaba afectado por fatiga muscular.

El animal, según las autoridades, llevaba 5 pasajeros cuando lo permitido por el decreto 0656, recién emitido por el Distrito, es 4 adultos. Luís Magín Guardela Osorio, director de la Unidad La Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria, Umata, aseguró que 'la Alcaldía se ha esmerado por emitir un decreto para mejorar el estado de los caballos y el servicio de coches turísticos'.

'El caballo se desplomó por cansancio, por abuso, que puede estar tipificado como maltrato animal en el código, es un caso de maltrato animal porque es un caso de abuso continuo y excesivo del animal, que ha llevado a calambres y postraciones musculares', dijo.

El mal estado de los caballos

Para Martha Bonilla, miembro de la fundación Angeles con Patas, el estado en que se encuentran los caballos cocheros es lamentable y es necesario que los propietarios tengan en cuenta que no pueden derivar su sustento de unos animales famélicos y en crítica situación. 'Es pavoroso lo que estamos viendo ahora mismo con los caballos cocheros y que no se haga nada para evitar esta situación', dijo.