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Una líder social de El Carmen de Bolívar fue una de las primeras personas en dar la voz de alerta, en mayo pasado, que algo extraño pasaba con varias niñas a quienes les aplicaron la vacuna contra el virus del papiloma humano.

Hoy nueve estudiantes, entre los 13 y 16 años, están siendo atendidas en Bogotá, por médicos, que buscan despejar el porqué de los malestares y desmayos. El primer diagnóstico de las autoridades de salud, en voz del viceministro de Salud, que estuvo en la población es que algunas niñas tienen niveles anormales de plomo en el organismo.

Blanca Victoria Sabbagh García, en diálogo con EL HERALDO, indicó que las niñas 'enfermaron desde el mismo momento en que les aplicaron la segunda dosis de la vacuna. Una niña presentó un sincope, en marzo pasado, a partir de allí muchas vinieron con malestar, pero nadie lo asociaba a la vacuna'.

Contó que 'a finales de mayo, muchas niñas sintieron malestares en el colegio Espíritu Santo. Fue la primera manifestación masiva, unas mamás me contactan y les hacemos seguimiento a las niñas; eran en total 26, de ellas 9 están siendo atendidas en Bogotá, gracias a que el alcalde dio los pasajes y se dio por entendido en la solicitud'.

Sobre el ingreso de niñas a centros asistenciales, Sabbag piensa que puede haber niñas afectadas por el impacto psicológico de las imágenes que ven en los medios de comunicación. 'Cada momento siguen ingresando niñas de todos los colegios, por eso un dato exacto de afectadas no lo hay', sostuvo Sabbagh.

'Si uno se pone a analizar, hay muchas irregularidades, entre estas la aplicación de la vacuna que la hicieron sin guantes. No sé qué pudo haber influenciado para que las niñas de El Carmen hayan sido las afectados, no que la vacuna sea mala', comentó.

El alcalde de Carmen de Bolívar, Francisco Vega Arraut, se reunió con el viceministro de Salud, Fernando Ruiz, que visitó el municipio, la semana anterior, y descartó primero una alerta amarilla que posteriormente fue emitida. Los primeros análisis a niñas entre los 13 y 16 años arrojaron que sufrieron una intoxicación por presencia de plomo en el organismo.

Ante esta situación se encuentra en la municipalidad el toxicólogo Camilo Uribe Granja del Hospital Infantil de San José de Bogotá, para realizar un diagnóstico con las estudiantes que presentaron desmayos y llegaron hasta los centros asistenciales.

La líder social pidió no estigmatizar a las niñas de El Carmen de Bolívar. De las 26 atendidas inicialmente nueve están en Bogotá, tres permanecen en el hospital local y el resto se niega a acudir al médico, pese a tener recaídas, porque fueron 'señaladas de pertenecer a una secta satánica o que eran brujas'.