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Desde el 19 de febrero pasado los estudiantes de medicina de la Universidad de Cartagena están en pie de lucha para no dejar que un hospital de tercer nivel, como el Universitario del Caribe, cierre de nuevo sus puertas como ocurrió en el 2003, tras una larga crisis económica y financiera que se pudo superar años después.

La historia parece repetirse tras la reapertura en el 2007, delconsiderado el hospital de los pobres, que en el pasado fue el más importante de la región de Bolívar, Sucre y Córdoba. La politiquería y el desgreño administrativo lo llevaron a una situación insalvable y el Gobierno de entonces decidió su clausura total.

Ahora el HUC vuelve a pender de un hilo para subsistir, aunque el gobernador Dumek Turbay, el alcalde Manuel Vicente Duque; y el ministro de Protección Social, Alejandro Gaviría, recientemente se tomaron una foto sonrientes para los medios, tras declarar que el cierre del centro no está en la mente de ninguno de ellos.

Al hospital le deben las EPS unos $78.000 millones, lo que, dicen sus directivas, es la causa de la operación a medias que actualmente ofrece el centro.

Luego del plantón frente a las instalaciones del hospital, realizado el pasado 19 de febrero, los estudiantes realizaron otro mitín el 26 y 29 de febrero. Hace unos días se congregaron en la plaza de la Aduana y formaron las siglas del HUC. Querían llamar la atención del alcalde Duque con avisos pegados al pecho que decían: 'Si Di Carpio pudo por fin ganar el Óscar, Ud. puede salvar el HUC'.

Andrea Franchesqui, una de las participantes de las protestas, dijo que esta vez no se puede permitir que el hospital se cierre, como ocurrió hace años y que la ciudad debía saber lo que estaba pasando. 'Tenemos que salvar al hospital', afirmó.

Por su parte, María Angélica Morales, otra estudiante, señaló que 'si el HUC se cierra afectará la educación de todos nosotros, los semestres que rotamos en ese centro'.

Los estudiantes dijeron que a media que avanza el tiempo la situación empeora. Denunciaron que la atención a los pacientes es precaria y que no están llegando a este centro porque las EPS saben de la crisis que afronta.

Los perjudicados son los estudiantes de Medicina de la UDC porque en este hospital realizan sus prácticas.

Los líderes de las movilizaciones han solicitado a los organismos de control como la Procuraduría General de la Nación, la Contraloría General de la República, la Defensoría del Pueblo y la Personería Distrital, investigar lo que ocurre con el hospital y que se establezcan las causas de la verdadera situación financiera por la que atraviesa. Además, si hay irregularidades administrativas.

En virtud de esto, el personero distrital, William Matson Ospino, se pronunció ayer y dijo que la situación es preocupante. Aseguró que que la falta de recursos económicos ha originado cierres temporales de algunas áreas, atrasos en el pago de salarios, falta de insumos y caída en el flujo de pacientes.

El funcionario recibió un informe de los estudiantes de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cartagena que se declararon en cese de actividades.

Matson pidió tanto a las autoridades locales como nacionales, ponerle mucha atención a la situación que atraviesa el centro asistencial, en el cual anualmente se atienden cerca de 100.000 pacientes en sus servicios de urgencias.

Pidió a la Superintendencia de Salud practicar control y vigilancia a las EPS que le adeudan al HUC y proceder a sancionar en caso de que los dineros destinados para cubrir esta obligación se estén utilizando para otro fin.

'El hospital no está funcionando bien y nosotros como garantes de los derechos de los cartageneros, tememos que cierre sus puertas, agravando toda la crisis de salud que registra la ciudad', expresó.