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Cartagena. Los estudiantes del Programa de Medicina de la Universidad de Cartagena no dan su brazo a torcer.

Siguen su lucha por evitar que la corrupción, el desgreño administrativo y la crisis financiera acaben por provocar un nuevo cierre del Hospital Universitario del Caribe, HUC, el que sería el segundo en 14 años.

Día a día se incrementan sus mítines para exigir de las autoridades pronta solución.

En esta semana hicieron una osada manifestación visual colocando un enorme pendón horizontal en el Castillo de San Felipe, en el que piden que el HUC no se cierre. También se tomaron las oficinas del rector de la Universidad de Cartagena, que, según los manifestantes, se negó a atenderlos. Los jóvenes gritaron consignas contra el funcionario.

Desde hace dos semanas, diariamente los estudiantes llaman la atención de la ciudadanía cartagenera para que se entere de la grave situación del hospital de tercer nivel de la región y donde los estudiantes hacen sus prácticas y se preparan profesionalmente. Este centro es conocido como el hospital de los pobres.

Según sus directivas, la institución de salud registra un déficit de 78.000 millones de pesos, que corresponde a lo que las EPS le han dejado de pagar al hospital por sus servicios.

Hoy el HUC tiene varias secciones cerradas, la atención en emergencia es deficiente y los trabajadores constantemente reclaman por pagos atrasados.

El gobernador de Bolívar, Dumek Turbay, y el alcalde de Cartagena, Manuel Vicente Duque, han prometido que no van a dejar cerrar el hospital, sin embargo, no se conocen las medidas concretas para evitarlo.