Decir los nombres de los responsables de un atraco del que fue víctima una joven, en el corregimiento de Bayunca, sería la razón por la cual fue asesinado de cinco puñaladas el estudiante universitario Erick José Coneo Altamar, de 19 años.
Coneo, quien cursaba primer semestre de estudios navieros y portuarios, fue atacado por cerca de 10 integrantes de una pandilla conocida como ‘los Charquiteros’ o ‘los Pensionados de la 4’, a las 11:50 de la noche del domingo, en Bayunca.
Según testigos, uno de los delincuentes se le acercó a Coneo, quien compraba una porción de carne asada en un puesto de comidas rápidas, y le dijo delante de varias personas: 'aquí está el sapo'.
Coneo fue acorralado por el grupo de delincuentes y, mientras varios lo agarraban, uno tomó un puñal y lo atacó en la espalda, el pecho y los brazos.
Coneo, a pesar de que se encontraba en inferioridad numérica, alcanzó a agarrar un cuchillo que estaba en el puesto de comidas rápidas y logró causarle una herida en la cara a uno de los delincuentes, con la intención de defenderse. Sin embargo, no pudo hacer nada para evitar su muerte.
Después de que los responsables del crimen huyeron de la zona, un amigo del estudiante universitario lo cargó entre sus brazos y lo trasladó hacia el puesto de salud local. Sin embargo, fue demasiado tarde.
De acuerdo con lo expresado por Jackeline Altamar, tía de la víctima, su sobrino fue asesinado porque tuvo el valor de denunciar.
'Él (Erick Coneo) le dijo a la muchacha quiénes eran los que la habían atracado. Hay mucha gente que no se atreve a denunciar, pero mi sobrino tuvo el valor de hacerlo y por eso lo mataron', dijo Altamar.
De acuerdo con lo expresado por testigos del crimen, entre los responsables estarían los sujetos conocidos como ‘el Gasparín’ y ‘el Iguano’, entre otros, quienes se habrían escondido en el barrio Las Charquitas, en Bayunca.
La Policía Metropolitana de Cartagena inició la investigación del caso, pero no han sido reportadas capturas hasta el momento.