Las torrenciales lluvias que en las épocas invernales azotan a la ciudad dejan innumerables daños, inundaciones, damnificados y caos. Por eso dentro del Plan de Desarrollo de Cartagena se planteó una alianza público privada que permita llevar a cabo el Plan Maestro de Drenajes Pluviales, una megaobra que solucionaría los problemas que dejan las tormentas y otros fenómenos climáticos en esta ciudad, que está amenazada por el cambio climático y el aumento del mar. Se estima que en 30 o 40 años, según los expertos ambientales, dejaría bajo las aguas a gran parte del Centro Historico y el turístico de Bocagrande.
En el 2010, la alcaldesa de entonces Judith Pinedo planteó financiar el Plan de Drenajes Pluviales con recursos del Gobierno nacional y por medio del sistema por riegue y recaudo por valorización. El costo en ese entonces era de $270.000 millones.
Se intervendrían los canales Ricaurte, Matute, Calicanto y Ciudad del Bicentenario.
Hoy el alcalde de Cartagena Manuel Vicente Duque habla de dos billones de pesos para la construcción del sistema de drenajes pluviales que se requiere.
Duque le dijo al gobierno nacional que sin su apoyo financiero esta mega obra no se podrá ejecutar.
Por eso propuso que a través de una APP y el compromiso de la Nación se logre desarrollar este sistema. Las esperanzas surgen porque en la reciente sanción de la Ley del Sitio de Cartagena, que conmemora la actitud heroica de los cartegeneros que hace 200 años resistieron la crueldad del reconquistador Morillo, se contemplan inversiones y desarrollo de proyectos, entre ellos está el plan de drenajes pluviales.
Es tan urgente la obra que la Defensoría del Pueblo de Bolívar se pronunció hace poco y dijo que se hace necesario que se desarrolle dicho plan. Irina Junieles, la defensora, dijo que se han presentado tres acciones populares para la protección del caño de Juan Angola y el canal Tabú, en la zona suroriental de Cartagena.
El proyecto que se tiene busca detener el impacto que producen las inundaciones especialmente en las zonas más pobres. El estudio ya se hizo por parte de la Universidad de Cartagena. Consta de tres fases: la de diagnóstico, que ya se hizo. La factibilidad, también realizada, y la última es la de construcción. En ella se diseñarán las estructuras hidráulicas y la ampliación y el mantenimiento de las existentes. Los investigadores estudiaron la intensidad de las lluvias a 10 y 20 años.