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La Sociedad Aeroportuaria de la Costa (SACSA), compañía cartagenera que completa 20 años la concesión para administrar y operar el aeropuerto Rafael Núñez, planea una ampliación de esta terminal que permita movilizar a 11,5 millones de pasajeros al año.

La empresa sostiene que recibió un aeropuerto en condiciones de operación básicas, que recibía un promedio de 900.000 pasajeros al año. 'Hoy en día, gracias a la implementación de diferentes obras, contamos con una terminal moderna y adecuada para las necesidades del momento', asegura.

El proyecto de ampliación requiere una inversión total de $500.000 millones para el desarrollo de la infraestructura, que se harían con recursos privados, en las obras, operación y mantenimiento. 'Queremos construir sobre lo construido, aprovechando los recursos existentes, la capacidad instalada, y ofreciendo cada vez un mejor servicio a nuestros visitantes y a los cartageneros', dice la SACSA.

Busca pasar de 5 millones de pasajeros al año a casi 12 millones.

El proyecto contempla tres etapas en las que se buscará aumentar las posiciones comerciales en un 68%. Esto significa que se empezaría a recibir y a atender cada vez más vuelos. También construir una nueva terminal internacional, ampliando la capacidad con la posibilidad de abrir de nuevas rutas y ampliar la conectividad aérea de Cartagena.

Hacer mejoras en los espacios y en los sistemas de atención al pasajero. Construir un nuevo parqueadero de gran alcance y adecuar los sistemas de acceso. Mejorar la distribución de combustible por medio de un sistema fijo que alimente cada posición de las aeronaves.

El aeropuerto quedará con doce puentes de abordaje a las aeronaves, mejorando los tiempos de ingreso y la comodidad para los pasajeros. 'Cada etapa tiene un promedio de ejecución de diez años, sin embargo las obras serán entregadas a medida que se vayan finalizando, por lo cual la ampliación de la capacidad y la modernización del aeropuerto será tangible en tiempo real', explica el proyecto.

Según SACSA, entre las ventajas del proyecto, está el aprovechamiento y ampliación de la infraestructura actual que asegura la continuidad del servicio de transporte aéreo.

Considera que la ubicación actual es estratégica permitiendo que el pasajero se conecte fácil y rápidamente con cualquier punto de la ciudad. 'Esto es ahorro de tiempos en desplazamientos y costos para la movilización del pasajero', agrega.

SACSA sostiene que hizo una modernización del aeropuerto recientemente, 'pero la afluencia de pasajeros crece exponencialmente'.

El proyecto contempla mejoras en los espacios y en los sistemas de atención al pasajero.

'De no hacer este proyecto ahora, la ciudad quedará rezagada y no será competitiva', asegura la compañía. El proyecto, según SACSA, permite mejorar las capacidades del Rafael Núñez sin afectar la operación. Hoy se movilizan 5 millones de pasajeros al año. La meta es duplicar esta cifra.