Compartir:

Las alarmas se encendieron en la ciudad tras la presencia del caracol africano en doce barrios de Cartagena. El Establecimiento Público Ambiental (EPA) de Cartagena junto con la Policía Ambiental adelantan acciones tendientes a identificar y emprender acciones para recoger los moluscos siguiendo los protocolos de seguridad establecidos por el Gobierno Nacional, teniendo en cuenta que constituye una grave amenaza para la salud de los humanos.

Los sectores

La autoridad ambiental confirmó que hasta ayer había presencia del molusco en los barrios Las Gavias, San Fernando, Bocagrande, Castillogrande, El Recreo, Los Abetos, Chipre, Cavipetrol, Urbanización Toscana, Bruselas, Centro Comercial Supercentro Los Ejecutivos y Manga.

Como parte del plan de prevención las autoridades dictan charlas sobre cómo actuar cuando encuentren al animal (Ver recuadro). Se incluye inspección en los viveros por la incidencia que estos establecimientos tienen con la venta de tierra negra y especies forestales, donde se presume pueden estar trasladándose los huevos del caracol africano.

El Ministerio de Ambiente ha categorizado al caracol africano como especie exótica invasora, y una de las 100 clases más perjudiciales y peligrosas del mundo tanto para el ambiente como para la salud humana.

Por su voracidad, afecta gravemente varios tipos de cultivo y vegetación nativa. Su propagación en Colombia se ha producido a consecuencia de su introducción como mascota y por los supuestos beneficios para la salud de la piel de la baba que utiliza para desplazarse.

Las autoridades ambientales explican que esta especie tiene una concha cónica con rayas longitudinales de color marrón oscuro y beige; su tronco y cabeza tienen aspecto húmedo, textura gomosa y de color marrón. Puede alcanzar hasta 30 centímetros de longitud, y en condiciones naturales, tiene un promedio de 10 centímetros de longitud.

¿Qué hacer si se encuentra al animal?

El Establecimiento Público Ambiental recomienda a la ciudadanía que una vez detecten el caracol debe ser recogido y depositado en un recipiente que contenga cal. El animal debe ser enterrado, siguiendo las medidas establecidas. Y se recomienda no matarlo porque podría afectar especies locales locales inofensivas y muy parecidas. Si el caracol se halla dentro de la casa, se debe limpiar muy bien las superficies por donde pudo haberse desplazado por lo que se recomienda usar guantes e hipoclorito de sodio.