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Luego de que la Contraloría estableciera el año pasado 36 hallazgos fiscales por $8,5 billones en la construcción de Reficar, desde 2007, el ente de control dio a conocer que ayer inició una nueva auditoría en la ejecución del cuestionado proyecto de modernización y ampliación de la Refinería de Cartagena.

En la nueva actuación, el organismo de control estudiará una muestra significativa de contratos por alrededor de $1.000 millones de dólares, y también serán analizados los estados financieros de Reficar.

Luego de que la Contraloría estableciera el año pasado 36 hallazgos fiscales por $8,5 billones en la construcción de Reficar, desde 2007, el ente de control dio a conocer que ayer inició una nueva auditoría en la ejecución del cuestionado proyecto de modernización y ampliación de la Refinería de Cartagena.

En la nueva actuación, el organismo de control estudiará una muestra significativa de contratos por alrededor de $1.000 millones de dólares, y también serán analizados los estados financieros de Reficar.

El ente explicó que con la culminación de este segundo ejercicio auditor será emitida opinión sobre la razonabilidad de los estados financieros, 'para lo cual se levantaron los fenecimientos que había decretado la misma Contraloría (en administraciones anteriores) a la cuenta de la compañía'. Como una de las razones principales para ejecutar este estudio, la Contraloría, indicó que no le dio validez a la información que suministró en su momento Reficar, 'dado que se encontraron hechos que evidencian una gestión fiscal ineficiente, como pérdidas importantes y otras situaciones en su activo, que evidencian un desempeño no deseado'.

Añadió la Contralloría, por medio de un comunicado de prensa, que 'se va a mirar con lupa el desenvolvimiento económico del proyecto'.

Así las cosas, serán analizados aspectos como los cobros de utilidades por parte de los subcontratistas y en general el desempeño constructivo de los contratistas.

'Se adelantará una revisión en detalle de las fases de precomisionamiento, comisionamiento y puesta en marcha de la refinería, mirando temas como los pagos dobles y triples que se dieron en algunos contratos, para volver a adelantar trabajos ya efectuados', consignó la Contraloría.

En la auditoría anterior, según este organismo, fueron identificadas unas redes contractuales: varios contratistas que, de alguna manera, se compartían actividades de la refinería como los suministros.

16 auditores

La actuación especial será realizada por un grupo de 16 auditores. 'Entre los auditores hay profesionales como ingenieros civiles, de petróleo y de sistemas, abogados, contadores, economistas y administradores financieros, todos expertos forenses en auditoría', precisó la Contraloría.

Está previsto por el mismo ente que la auditoría finalice y sea liberada el próximo 30 de junio.

Procesos sancionatorios por entrega de información

El esquema de esta auditoría fue presentado por el Contralor Delegado para el Sector de Minas y Energía, y los integrantes del equipo auditor, al presidente de Reficar, Amaury de la Espriella, y el cuadro directivo de la compañía.

De la Espriella ofreció la disponibilidad para colaborar en la entrega de la información requerida.

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El Contralor Delegado dijo que en la auditoría pasada se presentaron inconvenientes en la entrega de información a la Contraloría y está siendo evaluada la posible apertura de dos procesos sancionatorios contra la firma CB&I por tal situación.

Traslado de hallazgos fiscales

La Contraloría Delegada para el Sector de Minas y Energía dio traslado el lunes de 29 de los 36 hallazgos fiscales que se encontraron en la auditoría hecha a Reficar el año pasado, a la oficina competente del organismo de control que adelantará los procesos de responsabilidad fiscal del caso.

En esa auditoría anterior se revisaron contratos por 1.730 millones de dólares y los hallazgos encontrados suman 943 millones de dólares, además del lucro cesante que se determinó en 1.936 millones de dólares, según la Contraloría.