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Luego de consolidar una inversión que supera los $2.837 millones, con un periodo ejecución de obras estipulado en siete meses, el gobernador Dumek Turbay Paz dio inicio oficial este sábado a los trabajos de construcción de la cancha sintética del sector La Bajera, en San Jacinto, en la región de los Montes de María.

Esta cancha sintética, llamada a convertirse en un espacio para el deporte y el sano esparcimiento, dispondrá de drenaje y cerramiento perimetral, dos camerinos, cuatro torres de iluminación eléctrica, además de puntos para el ejercicio biosaludable, zonas verdes, y senderos peatonales.

'Este escenario deportivo, más allá de ser una cancha sintética, es un espacio de integración para toda la comunidad. Hay casas cerca, en las que residen gran cantidad de vecinos, y por ello le hemos insistido al contratista en la necesidad de que todos los espacios sean pensados acorde con los residentes de la zona. Pensamos en el deporte, en la sana convivencia e integración, y así tenemos la certeza de que será', dijo Turbay.

Por su parte, el alcalde de San Jacinto, Abraham Kamell, destacó la construcción de este escenario como 'la materialización de un sueño por el que los sanjacinteros habían estado esperando desde siempre'.

El niño Isaac David González, quien hace parte de la escuela de fútbol Independiente San Jacinto, le agradeció al Gobernador por la construcción de esta cancha en la
que más de 200 niños y adolescentes practican fútbol.

'Estamos muy contentos porque, con esta nueva cancha, vamos a poder practicar y jugar fútbol como siempre lo quisimos. Nuestros papás también están muy alegres. Ya no tendremos tantos raspones y golpes', dijo el pequeño Isaac David.

La líder del barrio La Bajera, Ruby Ariaza, por su parte, destacó que el escenario deportivo será un punto de consolidación para que niños, jóvenes y adolescentes se alejen de las drogas o cualquier conducta delincuencial.

'Esta cancha permitirá que los niños y jóvenes aprovechen mucho mejor su tiempo libre. Además, es un alivio para cualquier madre de familia, ya que los muchachos no llegarán llenos de barro a sus casas, después de jugar los partidos, y eso también hay que valorarlo', destacó Ariza.